viernes, 20 de marzo de 2020

CARTAS de un amigo


                                                                 Habitación  de la Residencia/ Hospital

  Hola amigo:
                              Me han dicho que estabas en la habitación solo y que no puedes recibir visitas.

         No puedo contradecir las órdenes de médicos y personal sanitario. Pero  a mí no pueden darme órdenes, porque soy una carta amiga, que ha salido de un corazón que se preocupa por ti  y quiere que no te sientas solo. Y he venido a estar aquí, contigo, porque quiero estar, si tu me lo permites.

         Aquí estoy para decirte que ahí afuera, al otro lado de la puerta, en esta ciudad somos muchos los que estamos animando a los sanitarios, y nos acordamos mucho de las personas, que como tú estáis solos en una habitación.  Bueno, la realidad es que no estáis solos, porque vuestra familia, aunque no pueda venir está con vosotros, y los que no somos familia de sangre también.

         Somos  de verdad, una gran familia: La Familia Humana. Mi familia sabe que te estoy escribiendo, y me dicen que aunque "estemos en casa", que es una forma de ayudar, también estamos en la Residencia o el Hospital contigo y con cada enfermo.  Ellos y yo deseamos llevarte todo el ánimo para que sigas luchando  junto con las personas que te cuidan, tu también.

          La recuperación de tu salud será aun triunfo de todos.  Así que venga, valiente, vamos a conseguirlo. Todos juntos no podemos fallar. Seguro que además quien lo puede todo, está con nosotros y nos ayuda  y da fuerzas desde dentro a cada uno.

         Hoy, solo quiero decirte eso, y no quiero cansarte. ¡Cuídate!  Seguro que me crees si te digo que somos un ejército en lucha contra la enfermedad.

         Con todo afecto, recibe un gran abrazo mío y de mi familia y de esta ciudad que es la tuya.

         Para que veas que esta carta es de alguien real,  quiero firmarla, aunque no me conozcas.

                                             Firmado: José Manuel Belmonte
         

                       .........................................................................................................



                                                                  Habitación de la Residencia/ Hospital
                      Hola amiga:
                                          He sabido que estabas en la habitación sola y que no podías recibir visitas.
                     No suelo contradecir las órdenes de médicos y personal sanitario. Pero  a mí no pueden darme órdenes, porque soy una carta amiga, que ha salido de un corazón que se preocupa por ti  y quiere que no te sientas sola. ¡No lo estás!
                  Hoy he venido para decirte  en primer lugar que, aunque extrañes  y sientas algunas ausencias, la realidad es que tal vez  en estos momentos es para sentirnos unidos y protegidos. Médicos y todo el personal sanitario están haciendo lo que pueden por ti; tu familia y muchas amigas y amigos, ahí afuera, se acuerdan y te recuerdan las 24 horas. 

                  A nosotros nos han dicho que por tu bien y el nuestro, "nos quedemos en casa", para que ni vosotros empeoréis ni los de fuera tengamos que ingresar y saturar los hospitales.  Las curaciones llevan un proceso, que no es mágico, sino un poco más lento de lo que tú y todos desearíamos.

                 Esta enfermedad tiene de bueno, que nos ha hecho sentir una familia. Todos somos la Familia Humana, que consta de personas que llevan la misma sangre y otras que también tienen alma, corazón y sentimientos, y lo mismo que los tuyos, también se acuerdan de ti, y de las otras personas que están en las otras habitaciones de este mismo hospital o de otros.

                Los seres queridos de tu familia y los que también, sin conocerte, te apreciamos y queremos, deseamos llevarte un poco de compañía con estas líneas, y todo el ánimo y la fuerza para que luches cuanto puedas y entre todos podamos vencer.

                A algunos nos han recomendado y exigido "que estemos en casa", pero también hay otros muchos que "no pueden quedarse en casa aunque quisieran", son todas las personas que os cuidan en tu Residencia u Hospital,  conductores de ambulancias y fuerzas y cuerpos de seguridad.  Es decir: Todo un Ejercito para luchar contra el pequeño virus. Entre todos y con quien nos da la vida, si tu luchas, vamos a vencer.

               Venga, valiente, ¡No estás sola!, ¡nos importas!, ¡te  queremos! . Mi familia está encantada de que te esté escribiendo.
 
               No soy una persona anónima, quiero que te mejores.  Y si sigues ahí a lo mejor me escapo  y vengo a que me cuentes cómo sigues.Un fuerte abrazo, amiga. 
       
               Me llamo,
 José Manuel Belmonte


PUBLICADO EN
ESPERANDO LA LUZ   21-03-2020
EL HERALDO DEL HENARES  22-03-2020

4 comentarios:

  1. Que maravilla de cartas, si fuera yo quien las recibiera, confinasmda y sola. Seguro que me alegraría el alma. Preciosas.
    Yo con tu persimo, y en tu nombre las voy a llevar al hospital del HULA. Y me animaré a escribir otras de mi parte

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Emilia, es que esas personas solas en su habitación del hospital o de su residencia, están muriendo sin ver a los suyos, sin recibir su visita y su cariño. Y tenemos medios para por lo menos que sepan que no están solos. Que pensamos en ellos, porque son nuestra familia.
      Me alegra que puedas llevar las cartas al HULA o al Asilo, o a la Residencia X.
      Un abrazo.

      Eliminar
  2. Maravilloso, Jose, esto anima a las personas que en estos momentos estan pasandolo mal, ojala reciban muchas cartas como estas .
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. Hola Pilar, yo estoy dispuesto a escribir todos los días. También tengo familiares a quien ni los propios hijos pueden acercarse para darles un abrazo, aunque cumplan años, o estén tristes.
    No podemos pensar solo en "estar en casa". Para mí no basta.
    Un abrazo y cuidaros.

    ResponderEliminar