miércoles, 27 de agosto de 2014

Resumen del verano: salto cualitativo.


                 Finaliza agosto. Muchos han aprovechado el verano para cargar pilas y volver con nueva energías. Quienes hayan podido desconectar de los medios, al regreso encontraran sorpresas en el mundo. Quienes, por deformación profesional o por costumbre han seguido las noticias, no volverán más relajados. No ha sido un verano tranquilo, en absoluto.
               Se ha producido un salto cualitativo en la degradación humana. Cada país soporta, envuelto en el silencio y atonía, un cierto nivel de corrupción. Pero si los niveles suben y amenazan con la asfixia, puede terminar por explotar. En España, también.
            ¿Se puede encarrilar la economía sin recuperar  los auténticos valores? Si los políticos se las pasan por el forro, ¿quién tiene el deber de hacer respetar las leyes?
                No es cine. En el colmo del esperpento, algunos ciudadanos de una comunidad han tomado las armas disparando sus armas de fogueo (Trabucaires) contra la vivienda de un ciudadano (lo que puede ser constitutivo de delito). “Treinta y cinco años de odio/sabiamente programado/ han hecho de Cataluña/ territorio enfrentado…porque la justicia está en “Madridt” veraneando” (Ussia, 26-8-2014).
            Y como importa la “pela”, el “euro” o  el “dólar”, batimos records de memez y  de turistas. A muchos de éstos ni el sol interesa, ni la mar, porque van como Adán, al desnudo, les gusta el ruido, las voces y las drogas y, no respetan a nadie, ni de  noche ni de día. A ese turismo macarra, que se aloja en pensiones u hoteles ilegales lo llaman “turismo de borrachera”, de locura, e incivismo. Si todo se permite, todo es legal, dicen. Están encantados. ¡Dispuestos a repetir el año próximo!          
            Así que en cualquier parte del Planeta, “todos piensan en cambiar el mundo y nadie en cambiarse a sí mismo” (L.Tolstoi). Así nos va. Nadie piensa o  habla de regeneración social, de rearme ético y humano. El desorden propio de la mente y del corazón  se vuelca  en la sociedad, se vomita materialmente, por los ojos, la boca y las acciones.
           Por eso, se ha producido un salto cualitativo en la convivencia. Este verano, “velis nolis”, (quieras o no quieras; de grado o por fuerza) hemos descubierto, un Continente: “África”; y algo tan cercano y vital  y necesario como “la sangre”.
           Naciones Unidas y la civilización en general, han ignorado con demasiada frecuencia al Continente Africano, porque el hambre no es contagiosa. Pero las malas condiciones de vida en la mayoría de los países han encendido las alarmas.  No se trata de la emigración masiva hacia Europa, se trata del Ébola.  Este virus, sí es contagioso y lo que es peor, puede ser mortal, y no entiende de nacionalidad o color de sus víctimas. Tenemos ya  más de 2000 víctimas, algunas en Europa, y también en España. Ojalá la vacuna, o los fármacos experimentales puedan curar pronto, in situ, a los infectados, y no llegue a convertirse en pandemia.
            La sangre. Ciertamente desde Caín, ha habido muertes, enfrentamientos y guerras. Los derechos humanos, y el imperio de la ley, no han sido una conquista fácil. Posiblemente nunca fueron universalmente respetados. Las reglas de convivencia y el respeto a los límites territoriales han tenido que irse aprendiendo. Los Tratados Internacionales, y el Derecho Internacional Humanitario, habían ido encauzando la aceptación de ciertos límites, y ciertos cauces legales para dirimir posibles diferencias. En algunos casos, las sentencias  de los Tribunales de Justicia Internacionales, ( de la Haya o de la ONU) o el Tribunal Penal Internacional habían contribuido a crear un clima de respeto.
            Pero el salto cualitativo, se ha producido por el odio y el fanatismo islamista, apoyado por naciones a quienes les sobra el dinero, y que sin escrúpulos quieren aumentar su influencia internacional. Ese dinero, compra armas, tapa la boca de quien intenta protestar y ata las manos a la condena unánime de la Comunidad Internacional.  Con armas y sin una posición firme de condena, el infierno de la crueldad  ha alcanzado límites de inhumanidad nunca vistos en la raza humana.
            Nunca, un menor, una mujer, un anciano, o un prisionero,  habían sido tratados de forma tan bestial y cruel y ante los ojos del mundo. Cercenar gargantas y colgar las cabezas como trofeos, degollar seres humanos indefensos (mujeres y niños incluidos), como si fueran bestias en la plaza y a la vista de los niños, disparar a los civiles desarmados a arma tocante, es insoportable e intolerable.
            Les aseguro que he visto tanto dolor causado por venganza y fanatismo, tanta sangre inocente  derramada, recogida en barreños o tirada por el suelo, tanta muerte sin sentido, sin causa, sin razón, que me duelen literalmente las entrañas. Los terroristas no buscan solo la  limpieza étnica, quieren jactarse de acabar con quien sea cuando quieran y como quieran.
           Los mismos asesinos, secuestran, violan, mutilan a sus víctimas y aprovechan el poder de la informática, para colgar sus videos en las Redes Sociales, o enviarlos a las cadenas televisivas de todo el mundo.
            Y mientras, la otra cara de esa escalofriante y terrorífica moneda es, que el mundo libre, asiste atónito a esos hechos, al avance del Estado Islámico (EI) pero no mueve un dedo, porque se cree seguro y piensa que eso no le afecta.

“Cuando un Estado no tiene la capacidad de controlar los niveles brutales de violencia… (como es el caso ahora en Irak), entonces la comunidad internacional tiene la obligación de intervenir para eliminar la capacidad de violencia de los delincuentes”.
            No quieren ver que cada día, ese fanatismo bestial, vengativo, destructor, capta cientos de personas nacidas en España, Francia, Gran Bretaña, Italia, Alemania, Estados Unidos etc.   Que luego, son enviados/as a Siria, Irak, Libia, etc., y están dispuesta a poner en práctica lo que les han enseñado, como el inglés que degolló al periodista americano. Recuerden…
            En un video  difundido el martes en internet por EI aparece un individuo encapuchado vestido de negro que con un cuchillo empieza a degollar a un hombre que podría ser el periodista norteamericano James Foley, quien en la imagen siguiente aparece decapitado. "Cualquier agresión contra Estado Islámico es una agresión contra los musulmanes que han aceptado el califato islámico y su liderazgo", declara antes de proceder a la ejecución el verdugo, que según analistas es británico, por su acento y sus modismos.
             Esa ejecución, provocó reacciones de horror y llamadas a reforzar la ofensiva antiyihadista.  Francia propuso una "estrategia global" contra EI, al que definió como un “Estado terrorista".
               El primer ministro británico, David Cameron, interrumpió sus vacaciones para discutir con representantes de su gobierno y de las agencias de inteligencia "la amenaza que constituyen los terroristas de la organización Estado Islámico".  Ha expresado su preocupación por la participación de islamistas británicos en las guerras de Siria e Irak y por su posible regreso con la intención de llevar(o traer en este caso) la "yihad" a suelo británico.
              Alemania se mostró dispuesta a enviar armas para  ayudar a los kurdos iraquíes.
             España y su descontrol, está amenazada, por supuesto. Se sabe que la yihad está captando aquí fanáticos. Pero apenas se controlan los movimientos musulmanes, y el estado de Taifas Autonómico, hace difícil un pronunciamiento firme a nivel estatal. Total que ni pincha ni corta. El genocidio que se está produciendo en Irak y en siria, contra ciudadanos civiles indefensos y desarmados, no provoca descontento masivo en los ciudadanos. Sólo algún WhatsApp es enviado pidiendo oraciones. Si hay algunas denuncian en las Redes. Pero, en general, o no se han enterado o ni fu ni fa.
            Así que, una vez más, la Comunidad Internacional, ha dejado que sea “el malo de Obama”, quien  saque las castañas del fuego, y haga frente al EI, tanto en Irak, como en Siria, mientras el mundo sigue mirando hacia otro lado de vacaciones.
            Creo que, cuando el mundo deje de mirar hacia otro lado, los políticos se dejen de discursos, tienen que poner manos a una acción conjunta para conseguir la paz. Para ello habrá que desarmar, en Gaza a Hamás, en Siria a Hizbullah y en Irák a EI.  Y en cada país, un poco más control del fanatismo religioso, y las arengas impunes de los líderes religiosos.
              Por si acaso, dejarse ya de tonterías pseudoprogres: “Twitter se ha convertido en un formidable altavoz para las manifestaciones de la más absoluta miseria moral e intelectual”, como dice  Elentir. Twitter no es la causa de que haya una epidemia de bobos o algo así… pero les brinda la ocasión para manifestarlo  de forma gratuita.
             Deberían saber que es contradictorio e imposible (y peligroso) disfrutar de las ventajas de ser romano y al mismo tiempo aplaudir a los bárbaros”, como dijo Pérez .Reverte.
            Lo que nos espera, si no somos capaces de dar un salto cualitativo hacia una mundo más humano, es lo que sigue…lo dice alguien con autoridad en estos temas y desde Mosul: “Nuestros sufrimientos hoy son el preludio de los que ustedes, europeos y cristianos occidentales, sufrirán en el futuro cercano. […] Si no entienden esto lo suficientemente pronto, se convertirán en víctimas del enemigo que han recibido en su casa”.
         Ojo al dato: "Cuando encontréis infieles, matadles hasta el punto de hacer con ellos una muerte humillante; si es posible por decapitación" (Corán 47,4)
             Pérez-Reverte  ha dicho sobre el Islam: “No les quepa duda. Seremos decapitados, tarde o temprano”. Supongo que la realidad es simple: van a ganar, porque son fuertes, y jóvenes, y tienen hambre, y desesperación, y fe. Y coraje para luchar”. Mientras que ”nosotros somos viejos, inseguros, demagogos, incultos y cobardes”. 

video:http://www.youtube.com/watch?v=AUjHb4C7b94






PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES: Blog LA TANGENTE, 27-08-2014
http://www.elheraldodelhenares.es/pag/noticia.php?cual=22329; BITACORA DE BELMONTE EN CIVICA: 01-09-2014: http://www.investigadoresyprofesionales.org/drupal/content/resumen-de-este-tiempo-salto-cualitativo





martes, 19 de agosto de 2014

La otra cara de la guerra ¿es noticia?

        Aunque parezca increíble, esto es la continuación de la transcripción del wasap de una joven palestina, publicado aquí.  Ver  en enlace.
http://belmontajo.blogspot.com.es/2014/08/lo-peor-de-la-guerra-no-es-el-horror-es.html
http://www.elheraldodelhenares.es/pag/noticia.php?cual=22232

http://www.investigadoresyprofesionales.org/drupal/content/lo-peor-de-la-guerra-no-es-el-horror-es-la-carencia-de-sentimientos
        La mente rápida de Ariel se puso en movimiento. Su novia Leila, nada tenía que ver con la mítica guerrillera palestina del mismo nombre. Pero…estaba enamorada de un judío.  Algo revolucionario, porque rompe todos los moldes, todos los cánones y todos los tabúes. El móvil de Leila, al otro lado de la frontera, no respondía. Sin embargo podía ver que seguía “en línea”.  ¿Por qué? Si a ella le había pasado algo cuando estaba en el wasap, no podía ser muy grave. ¡Su móvil funcionaba! Su corazón se agarró a esa esperanza tecnológica, para no morir.
        Sonaron las alarmas. Hamas había roto otra vez la tregua, posiblemente Israel habría respondido a la amenaza. Era probable que alguna bomba hubiera caído cerca de su casa, al lado de uno de los túneles. Si estaba herida, tenía que encontrarla. Estaba triste, pero decidido. Ella acababa de comentarle en la conversación, que en la Franja de Gaza casi todo estaba destruido. No encontraba la forma de desenredar sus sentimientos y encontrarle una salida. Desconocía que ese móvil estaba en manos de otra mujer con agallas.
      La periodista italiana, en efecto, después de enviar la transcripción del texto del wasap que había encontrado en el móvil de Leila, intentó averiguar si había cerca un hospital. Miró el móvil, una vez más. ¿Encerraba la solución? Se decidió a preguntar en la calle.
     Nadie se detenía cuando preguntaba. La miraban extrañados. Sorprendentemente una niña que iba corriendo con su madre, se volvió y le dijo: “Barcilay”. Salió corriendo a unirse con su madre.  Sólo dijo eso, pero con una claridad incuestionable.
        Quedó confusa y como petrificada por la rara palabreja que acababa de escuchar. Había oído bien: “barzilay” , o “barcilai”. ¿Qué habrá querido decir? Dudó un momento, desconcertada. Tuvo un presentimiento y volvió sobre sus pasos, para ir a su habitación.
        Abrió el ordenador y escribió la palabra en el buscador. Inmediatamente apareció en su pantalla: heb. Barzillay, "el de hierro" o el "fuerte".  ¡Alucinante, pensó! ¿Se referían al chico hebreo enamorado? ¿Lo conocían? Echó una ojeada a la transcripción del wasap. El chico se llamaba Ariel y no Barzilai. Su esperanza  parecía desvanecerse.
         Sin embargo el ordenador siguió escribiendo: “Durante la rebelión de Absalón, cuando el rey huyó a Transjordania, Barzilai llevó provisiones a David y a su ejército (2 S. 17:27-29). Después de la victoria sobre Absalón, acompañó al rey a Palestina occidental y fue invitado a formar parte de la corte real. Rehusó la invitación por causa de su edad, y solicitó que su hijo Quimam fuera en su lugar (19:31-40). Agradecido por los servicios prestados, David solicitó a Salomón que tratara con benevolencia a los hijos de Barzilai (1 R. 2:7)”.
         Luego la palabra existía; significa  “fuerte”, “valiente”. Además un antepasado ayudó al Rey David durante una rebelión. Seguro que para Israel es importante. Volvió a tener una corazonada: ir a Israel para seguir allí su pesquisa.
       Como si le quemara la pregunta, en la misma frontera, pronunció la palabreja que le dijo la niña gazati, y le preguntó a un agente israeli,  ¿“barzilai” le decía algo?

       -¿Está usted enferma señorita o busca a algún enfermo?   
       -No, en absoluto, no estoy enferma.  Solo quería saber, algo sobre Barzilai, si puede  ser.
       -Es que… precisamente ese es el nombre de un hospital.
       -¿Aquí en Israel?
       -¡Claro!
       -¡Muchas gracias, señor!
       
       Le dio un vuelco el corazón, como para saltar de alegría, pero no quería exteriorizarlo delante del agente.
      Cogió un taxi y dio la dirección de un hotel. En cuando llegó abrió su ordenador y tecleó en el buscador: hospital barzilai…un segundo después, en su pantalla apareció…Barzilai Medical Center is a 490-bed hospital in Ashkelon in southern Israel (con fotografía y un teléfono).
      ¡Youjou! exclamó, alzando los brazos, poniéndose en pie de un brinco.  Pensó rápidamente: si el hospital está en la ciudad sureña de Ashkelon, seguro que  está cerca del norte de Gaza. El corazón le latía con fuerza. ¡Dios que suerte! ¿Estaría  allí Leila?
       Le pareció absurdo. Están en guerra. Pueden incluso estar al alcance de los misiles de Hamas. Según los datos, el hospital se encuentra a tan solo 12 km de Gaza, en línea recta. Podrían ser bombardeados en cualquier momento. ¿Cómo van a llevar allí heridos que no sean los suyos? Por preguntar no perdía nada… Telefoneó…

        -Lo único que puedo decirle, señorita, es que  aquí intentamos salvar vidas. Por lo que usted cuenta, allí corren huyendo de la muerte.
        -Seguro que las dos cosas son verdad, pero, ¿pueden coincidir?  Quiero decir, si les llevan algún herido de Gaza, niño o adulto, ¿ustedes lo atenderían también?
        -Aquí estamos preparados para cualquier eventualidad. Atendemos a todos los heridos por igual. En la paz, y también ahora en la guerra, atendemos a los que llegan heridos, sin preguntar, de dónde proceden, ni el credo que profesan, ni si tienen la piel de un color u otro.
        -Me parece admirable. Pero ¿cómo puedo confirmar lo que acaba de decir?
        -Es usted periodista, según ha dicho, venga  y compruébelo. Le puedo decir que desde que comenzó la guerra hemos atendido a más de mil heridos entre soldados, civiles, niños y adultos, israelíes o palestinos, judíos  y árabes.
         -Si le preguntara por un nombre concreto no me respondería y… lo comprendo, ¿pero si perteneciera a Hamas atenderían a esa persona?
         -No, no voy a responder sobre personas concretas. Acabo de decirle a usted que puede comprobar lo que desee. En nuestro país hay democracia. Lo que sí puedo decirle es que hay personas que vienen en secreto, porque esa organización terrorista, les prohíbe recibir tratamiento en nuestro territorio. Si llegan a saber que algún civil o  algún miembro de Hamas ha estado aquí, los matarán. No vamos a delatar a nadie y ponerlo en peligro. Nuestra misión es curar, aunque no siempre tengamos éxito, por las malas condiciones en que llegan.
        -Ha sido muy amable. Me pasaré por ahí en cuanto me sea posible. Muchas, gracias.

        Aunque acababa de llegar, comenzó a recoger sus cosas, para dirigirse a Ashkelon cuanto antes. Su intuición le decía que podía encontrar allí a Leila y devolverle el móvil. Pero ahí no acabaría la noticia.  Por eso cogió el móvil (o celular) de Leila que estaba cargando. Con la sonrisa dibujada en su cara, escribió en él lo más hermoso que había aprendido: Hospital Barzilai. ¡Sería suficiente! Estaba segura que al otro lado del wasap seguía el Romeo de esta historia, llamado Ariel. Después, orgullosa, escribió para su periódico la gran noticia: “La paz es posible, cuando los valientes no se muestran hostiles, solo ven personas y no preguntan quién es el enemigo”

      Llevaba unos días muy deprimido. Cuando vio Ariel el wasap se dio un golpe en la frente: ¡Barzilai, claro! Sí, tienen que haberla llevado a allí. Quien quiera que hubiera escrito esas dos palabras, conocía sus sentimientos. ¡Le había salvado la vida y posiblemente su amor por Leila! Salió para allá inmediatamente.

      La tregua de 72 horas se ha prolongado. ¿Tregua humanitaria o ganas de vivir? Como reconocía el médico uruguayo-israelí, Dr. Pablo Boksenbaum, Director del Servicio de Cirugía Ambulatoria en el Hospital Barzilai de Ashkelon (Ashqelon), “hay una sola forma de solucionar las cosas: que todos los líderes decidan dejar de lado su fanatismo religioso, político, que empiecen a pensar en el bien de las poblaciones que tienen a su cargo”. Mientras eso no llegue, seguirán las alarmas y la alerta roja: “tzeva adom, tzeva adom”. Cuando suena hay de 15 a 20 segundos para ponerse a cubierto. 

PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES, Blog LA TANGENTE, 20-08- 2014:  http://www.elheraldodelhenares.es/pag/noticia.php?cual=22275; BITACORA DE BELMONTE EN CIVICA, 02-09-2014: http://www.investigadoresyprofesionales.org/drupal/content/la-otra-cara-de-la-guerra-%C2%BFes-noticia



miércoles, 13 de agosto de 2014

Lo peor de la guerra no es el horror, es la ausencia de sentimientos.

          Ajena a los bombardeos, una yedra ha escalado el muro de separación. Una mancha verde que trepa, se alza y grita muda su esperanza. Nadie sabe dónde se alimentan sus raíces, porque nadie la riega, porque a nadie importa. ¿O sí? Algún artista aprovechó  los paneles de hormigón para dejar sus sueños en forma de grafitis.
          Lo cierto es que se ha vuelto a armar la gorda. En la franja, unos y otros, hacen silbar en el cielo sus mortíferas armas, que explotan destructoras en los lugares más increíbles. Columnas de humo y fuego, sirenas, gritos, carreras, dolor y muerte.
         Leila y Ariel tienen nombres míticos. Se conocieron en un hospital, donde apenas pudieron intercambiar unas palabras y un teléfono o su wasap. Nunca han hablado por teléfono por miedo; por miedo a propios y extraños. Están atrapados y separados por el muro. Ella en Gaza, él, en Israel. El móvil de Leila lo encontró hace unos días una periodista italiana, tirado junto a los escombros donde había caído una bomba. Increíblemente no estaba roto, pero quedó abierto y funcionando el wasap.  Esta es la transcripción:
       -Pero ¿por qué?
       -Sabes que nosotros no hemos roto la tregua.
       -Pero, han muerto  demasiados, y sobre todo niños.
       -Laila, a nadie le gustan las muertes y menos de los niños. Pero había armas en los sótanos y en las escuelas. De allí lanzaron los ataques.
       -Es una locura, Ari. No quedan edificios en pie, ni comida, ni nada. La gente está huyendo hacia los campos de refugiados…
       -Toda guerra es una locura. Esta también. Se pueden hacer las cosas de otra manera. Tendremos que aprender a convivir.
       -Cuándo, cuándo, dime cuándo?… a este paso, nunca.
       -Hay que intentarlo, por todos, por vosotros y por nosotros, y sobre todo por ti y por mí.
       -No creo que a mi padre, ni a mi pueblo les importemos nada. No veo más que odio, deseo de que Israel desaparezca, todos alzan las manos al cielo pidiendo venganza.
      -Nuestros soldados confirman lo que dices, pero creo que el camino del entendimiento es posible. Somos humanos ¿no? Y tú y yo nos queremos. El amor es más fuerte. Todo es posible.
      -Pero eso no para la guerra, y está empezando el corazón a entrar en crisis. Me duele todo, no duermo, no puedo por las bombas, las sirenas y las ambulancias y tenemos que vivir en una especie de agujero por donde lo único que veo es un poco de cielo, pero estoy aterrada. Esto no es vida.
     -Lo siento. Tal vez sea una buena idea no aventurarse por las calles. Dicen que hay muchos túneles, que terminan en Israel, y que ahí también hay armamento. Quieren volar los túneles.
     -¿Tendremos que volar también nosotros? Estamos abandonados. Esto parece un campo de exterminio.    
     -Cariño, yo no te abandono, lo sabes. Cuando puedes hablar me encuentras. Ahí, han bloqueado la llegada de la Ayuda Humanitaria. ¿Cómo se puede ser tan fanático?
      -No sé si es el fanatismo o qué, pero esta situación de destrucción no creo que la tengáis ahí vosotros.
      -Cierto, pero en la televisión el mensaje es que  el país tiene derecho a defenderse  de los ataques terroristas y a existir.
      -Ya, pero…esta escalada no parece proporcional. El mundo debería parar esto. ¿Qué autoridades hay que no detienen esta masacre? Esto es tremendo. Me ahogo aquí metida, esto no es vida, amor.
      -Deberías escapar por el túnel para acá, aquí estarías segura. Te estaría esperando.
      -Mi padre me mataría si se entera de mis intenciones… también te mataría si supiera que existes, aunque me quieras. No lo puede ni entender ni permitir. Lo nuestro, si no me raptas no podrá ser. La guerra es solo matar y ser matado. Y tal vez lo mejor sea  acabar pronto.
      -La guerra no puede matar el amor.  Por favor, no te hundas. Seguro que ahí las sombras te entristecen, pero tendremos una casa llena de luz, donde el amor llene cada rincón y donde todos sean bienvenidos. Somos jóvenes. Deberíamos de tener futuro, Leila.
      -Esta sombra fría, penetra hasta los huesos y destruye sentimientos. Tendré que llegar al muro, para escalar y darte un beso, y recuperar las fuerzas.
      - Dispuesto estoy a saltar el muro si estás tú al otro lado. A ver si esto acaba, y cesa el peligro para que puedas salir y sacudirte el entumecimiento, mi pequeña heroína.
      -¡Qué más quisiera yo que ser una heroína! Mis hermanos sólo quieren que me ponga un cinturón cargado de bombas y hacerlo explotar cuando haya muchos judíos.
      -¿A eso le llaman heroísmo?
      -Sí. Pero el otro día cuando llevaban  un herido al hospital, no se dieron cuenta que tenía un cinturón de esos, y como iban a la carrera explotó y murieron  muchos de los que le llevaban. Mi padre dice que fue horrible.
      -¡No me extraña! ¡Cuídate! Por cierto, han anunciado que Hamas acaba de romper la tregua de alto el fuego  que habían acordado de 72 horas. Seguro que Israel no va a cruzarse de brazos.
      -¡Que locura! ¡Ojo por ojo!  Otra vez. Y …más vidas, más familias rotas, más dolor y más odio. ¿Qué podemos hacer para detener esta escalada?
      -No lo sé Leila. Creo que tenemos que seguir queriéndonos, esperarnos, pensando en un futuro más humano, un futuro en paz, donde vosotros y nosotros podamos vivir sin sobresaltos.
      -Ari, ¿lo veremos tú y yo? ¡Dime que no es una utopía!
      -No lo es Leila. Tenemos que hacer que sea posible. Tiene que ser posible por nuestros hijos. Seguro que el terror no arregla nada, las armas no arreglan nada.
      -Me alegra que pienses así. ¡Seguro que tienes un gran corazón, aunque seas tan joven!
      -Siempre lo he creído, siempre creo que la utopía de una vida en paz, tiene que ser posible. Si no te lo he dicho antes es, porque tal vez no hubo ocasión.
      -Pues yo te voy a decir algo que estoy viviendo, en lo más hondo. Lo peor de la guerra no son las bombas, ni siquiera la carga de muerte cuando explotan. Lo peor es la falta de amor, y la muerte de un amor tan grande como el nuestro. Me muero a cada paso, pensando en ti.  Es horrible pensar que no podamos hacer realidad lo que sentimos.
      -Seguro. Tienes razón. Yo también lo creo…. Leila, Leila… ¿estás ahí?  Dime algo, por favor,  por favor….¡¡¡¡maldita guerra!!!

        ¿De verdad esto ha existido? La periodista extranjera no sabe qué pasó, ni dónde está Leila. Señala que su pretensión era la transcripción del wasap que pudo enviar a algunos medios.  Ella se limitó a decir:
        -“¿Qué fue más real, la guerra de los Montesco y los Capuleto, o el romance narrado  en la obra shakesperiana? En todo caso, yo me limito a decir lo que encontré en un móvil. ¿Puede negarse que estos jóvenes sean reales?”.

PUBLICADO en EL HERALDO DEL HENARES, Blog LA TANGENTE, 13-08-2014: 
http://www.elheraldodelhenares.es/pag/noticia.php?cual=22232; BITACORA DE BELMONTE EN CIVICA, 16-082014: http://www.investigadoresyprofesionales.org/drupal/content/lo-peor-de-la-guerra-no-es-el-horror-es-la-carencia-de-sentimientos.

sábado, 2 de agosto de 2014

Pequeña historia de mujeres grandes.

          No son brujas, sino meigas. No es lo mismo. “No es muy difícil encontrar meigas en Galicia, es decir, mujeres con gran capacidad psicológica para descubrir los problemas de sus vecinos, algunas de ellas con dotes de curanderas y expertas en dar los consejos adecuados a quienes se los demandaban”, dijo Domingo García Sabell ( médico, escritor, político y académico de Galicia).
          
      Mujeres extraordinarias, con grandes historias de pequeños acontecimientos diarios, y una humanidad  que contagia bondad y simpatía. No se ocultan, pero tampoco hacen alarde de su condición. Descubren cómo ayudar a quien lo necesita, sin mirar si son de aquí o de allá, si son nativas o tuvieron que cruzar el mar de la vida para llegar a estas tierras.
          
          Se fijan en los ojos y comprenden la inquietud y el desasosiego de quien se acerca o se hace encontradiza, en un bar, en la calle o en su asociación.  Quien se acerca, -joven o  no- trae una historia, personal.  Y ellas… escuchan,  escuchan, escuchan  tanto que  sienten a través de las palabras, el roto corazón de una mujer, su amor o desengaño, su ilusión, o el bloqueo ardiente y sangrante de la incomprensión. Todo eso y sus interrogantes.

           No preguntan por creencias de nadie, porque con la humanidad les basta para sintonizar con cualquier persona, con lo mejor de cada persona. Los sueños rotos que encuentran, los horizontes de esperanza, suelen  ser similares a tantos otros sueños rotos, y las esperanzas,  similares a las que todos alguna vez sembramos con ilusión y con cariño.

          Poco a poco descubren la necesidad de apoyo, la necesidad de un poco de luz, la necesidad de la necesidad de no estar solas. Esas maravillosas meigas, tienen  el don de hacerles sentir que no se van a encontrar solas, que el mundo no se ha hundido, que la vida sigue. No se contentan con decir un sí a la vida, se vuelcan para que sea posible hacerlo realidad, cada día.

           No tienen nada para dar. Tampoco nada que perder al darlo todo. Son mujeres con un poco de sensibilidad, con un poco de buena voluntad y mucho sacrificio. Ni son brujas, ni hacen milagros. Pero algo hacen, porque las cosas cambian, porque la gente viene, porque al marchar sonríen. Han parado desahucios, acogido a jóvenes sin familia, madres que quieren tener a su hijo. Acompañan al hospital, como una madre haría; y dispuestas a ir al fin del mundo si una madre o un niño, lo precisa.

         Hablo de las personas componentes de la Asociación Providav Lugo.  Una Asociación  conocida ya en España, incansables, sin desaliento, y por tener la puerta del corazón de par en par dispuestas a ayudar a la mujer, a la madre en situación de necesidad, a las familias con hijos menores y en riesgo de exclusión; por darles todo, con su tiempo, e implicando a la sociedad para que ayude a ayudar y se implique. No dudan en lanzar un S.O.S.MAMÁ, cuando necesitan algo que no puede esperar.

         Han visto multiplicarse los nacimientos, ya que atienden a 22 bebés menores de 2, años. Hay 67 personas más entre niños mayores de 2 años y personas adultas. Total de personas que atienden en estos momentos, 89. Hasta esa cifra ha crecido la gran familia. Y hay 5 bebes en camino.

            La Asociación nació como tal un frío 28 de diciembre, día de los Inocentes, de 2012. Encontraron un local pequeño pero luminoso, destartalado pero mejorable y capaz de servir de oficina y de Sede de referencia. Cuando lo acondicionaron, para atender, en Plaza de Armañá, 7 (Lugo), dieron servicio de atención y ayuda hasta finales de julio 2014. Hoy ya no están allí. Lo que con tanto esmero prepararon, se había quedado pequeño. Se han trasladado.

        Algo tendrán, las maravillosas meigas voluntarias de esa gran familia, pues han encontrado inmediatamente un local, casi totalmente acondicionado, para firmar y entrar. Hoy ya es agosto y tienen todo dispuesto para proseguir su obra. Habían enviado, en julio, una carta a los socios y simpatizantes: “Os comunico que el nuevo local de la Sede de PROVIDAV*LUGO, está en la Calle: Montero Ríos, 31,  Lugo 27002 (frente a Día).  El teléfono sigue siendo el mismo 666 572 168 y el correo electrónico también, claro: info@providavlugo.org “.

        Alguien ha dicho que es seguro que quien mueve los hilos de la vida,  mueve también los pasos e incluso los latidos del corazón de la gente buena. Vivir no tiene metas. Ayudar a vivir aunque es un programa de todos, las meigas  de Providav Lugo, lo han hecho suyo. Dicen, “es cuestión de amor, de ver la necesidad y no mirar hacia otro lado. Sí es cuestión de voluntad, claro, pero sobre todo, es también cuestión de humanidad”.

         Ha trascurrido, pues,  poco más de año y medio desde que comenzaron su andadura como Asociación. El reto continúa, no se va a parar, porque  la sociedad civil lo necesita.  En todo este tiempo, no han recibido ni una subvención, ni del Concello, ni de la Diputación, ni de la Xunta, ni del Estado.  Esperan que con el cambio de Sede, también cambie la forma en que los Organismos Oficiales comiencen a valorar lo que la Asociación está haciendo.

          En todo caso, nos dicen que también necesitan más voluntarios, porque no dan abasto para atender y hacer felices a estas personas.  Quien lo desee puede ponerse en contacto en las direcciones arriba in dicadas. Que nadie olvide que cuando nace un niño nace la vida. Y que el trabajo es duro, pero muy gratificante.
          La indefensión de un niño es natural, pero no debe ser sangrante. Las madres y las meigas tienen que defenderlos, incluso con su vida. Las personas altruistas también. La vida tan sólo tiene una exigencia, que la dejen vivir. ¡Basta de muertes y de guerras! ¡Basta de abusos infantiles, explotación infantil, maltrato, malnutrición y aberraciones por el estilo! A estas grandes mujeres, como a Sara Varas, “les sale la fiera cuando hacen daño a un niño”.

         Creo que hay que desearles toda la suerte del mundo en esta nueva etapa. Y por supuesto, darles las gracias en reconocimiento por cuanto han hecho por casi 100 personas.

         Concluyo con el profundo pensamiento de Nisargadatta: “la mejor forma de ayudar a alguien es llevarle más allá de la necesidad de ayuda”. De eso se trata. Es otra alegría compartida.  Es preciso señalar que  4 mamás atendidas en su día, con sus respectivos bebés,  han encontrado trabajo, se han establecido en otro lugar y ya no precisan la ayuda de la Asociación. ¡Enhorabuena! 

PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES, 02-08-2014, Blog LA TANGENTE: 
 http://www.elheraldodelhenares.es/pag/noticia.php?cual=22147