sábado, 6 de marzo de 2010

Manifestación por la vida: el domingo


No conocen al pueblo español.
Ni el gobierno, ni los políticos conocen bien al pueblo. Han salido del pueblo, pero suelen vivir en las nubes. Dicen trabajar para el pueblo, pero no lo escuchan. El pueblo es mucho más sensato que la clase política, en general. El pueblo puede pasarlo mal, pero no traga con todo. Desde hace algún tiempo hay mucho adoctrinamiento ideológico. La gente calla y rumia. La mayoría de los españoles, no está preparada para tragar ruedas de molino.

Lo decía mi paisano Ussía: “No me han educado ni preparado para aceptar como un derecho el más cobarde de los crímenes. No me han educado ni preparado para sentirme feliz y seguro en una sociedad que considera que traerá más salud a los españoles una ley asesina”.

Viene a cuento el comentario de Alfonso, porque engañosamente han envuelto la Ley con terciopelo. La ministra Aído, joven y sin experiencia fue la encargada de poner la cara por el gobierno para cambiar la legislación actual, mediante una ley orgánica llamada “ De salud sexual y reproductiva....” Las otras ministras, no madres, Teresa desde la Vicepresidencia y Trinidad desde Sanidad, tenían que apoyar a la de Igualdad, con todos los medios.

¿Hay alguien que pueda oponerse o ser contrario a la salud sexual y a la otra?

Una vez aprobada, han intentado vender la ley como una panacea. Hay que repetir la consigna. La encargada, de dar la cara, en nombre del grupo socialista, fue la Secretaria del Partido, Leire Pajin: “Esta ley traerá más salud a los españoles”.

Pero en fino envoltorio semántico hay un cadáver, o muchos, tantos como se quiera, porque lo que era excepción, lo han convertido en “derecho”.

Los españoles, “no entienden que el asesinato de cien o doscientos mil niños indefensos al año sea beneficioso para nuestra salud”. ¡Hace falta mucha ideología para decir tal sandez!

Los españoles, no entienden qué relación puede tener la muerte de los más indefensos con la salud. ¿O es que se da a esos “pequeños tesoros” el mismo valor que a la uña que por crecer hay que cortarla y tirarla a la basura?

El derecho protege la vida. La vida es la fuente de todo derecho. La ley no pueda dar “derecho” a matar. Sería inicua. La injusticia no puede ser un derecho, ni para la madre, ni para nadie. Sería retroceder a la ley de la selva.

Este domingo, día 7 los españoles, vamos a salir a la calle por el Sí a la vida. Tenemos que defender a nuestros niños en camino. La cultura progresista no es la cultura de la muerte. Queremos decirle a los políticos, con alegría, que el pueblo tiene voz, que no se engañen. Y también tiene voto, que no lo olviden. Que nosotros, en la calle, -muchos o pocos- somos una semilla de cambio y de regeneración moral.

Tardaremos más o menos, pero vamos a ganar el futuro sin eliminar a los inocentes. En ese futuro de brazos abiertos cabe la sonrisa de los niños. La sociedad quiere que se apoye totalmente a las mujeres con dificultad. Todos estamos aquí por una madre. Cuando una madre da a luz, el mundo tiene la alegría de un bebé y la protección de una abuela. Acabo de recibir este mensaje: “Hoy ha nacido a las 9,15. La mami y la nena están bien. El resto... babeando”. Real como la vida. Lleno de orgullo y de gozo como la abuela que lo envía.
PUBLICADO en EL HERALDO DEL HENARES el 6-03-2010

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