“Nadie es perfecto”. Con vida, cualquier reto (2)

Podía ser el titulo de una comedia divertida, pero no lo es.   ¿Quién es nadie?  Esa es la cuestión. Si “nadie es perfecto”, ¿lo es alguien? Por lo visto no hay más que gente perfecta y además importante, que sabe lo que quiere, y no tiene empacho en decidir, quien o quienes deben vivir, cuándo y por qué, como Rosa Regás, como Arcadi Espada, como las señoras y señores Diputados que votaron a favor del aborto libre o se oponen a la reforma de la “Ley de Salud Sexual”, de Bibiana Aido y su partido. Es así en todos los países.

 Con motivo de los Juegos Paralímpicos,  en mi artículo (25-08-2012) “Paralímpicos y Rosa Regás” expuse lo que pensaba de esta señora perfecta, con patente izquierdista para impartir derechos. Ella ante la insinuación del Ministro de Justicia de reformar la citada Ley,  en su Blog “Ellas”, del periódico Elmundo.es. dijo: “Señor Ministro, ¿no le parece que antes de dar vida a los monstruos debería ocuparse de que no se resquebrajara la dignidad de los vivos, y defender para ellos trabajo, vivienda, educación y sanidad?” Los llama así en dos ocasiones.  Según ella, un monstruo  sin dignidad para vivir, puede ser, según ella “un feto o una persona sin brazos, o sin pies”. http://belmontajo.blogspot.com.es/2012/08/paralimpicos-y-rosa-regas.html

Doble salvajada.  Sea feto o sea adulto, sin pies: monstruo seguro.

La Diputada Beatriz Escudero dijo el 7 de mayo, en el Congreso de España: “El Derecho a la Vida es el principal de nuestros Derechos, no habría libertad de expresión, ni derecho a la libertad sexual, ni derecho a decidir sobre nuestro cuerpo, si no tuviéramos un Derecho Fundamental, un valor supremo que es el Derecho a la Vida. Los derechos solo pueden defenderse desde la verdad, y la verdad nos la ha dado nuestro Tribunal Constitucional, “el concebido y no nacido tiene el mismo derecho a la vida que se reconoce a todos desde el momento de la concepción, es un ser humano con identidad propia digno de protección”.

Pues inmediatamente salieron de su cueva ideológica los defensores del aborto. Aunque, parece un sarcasmo, que aparezcan justo cuando se descubren los horrores de los hermanos Castro en Cleveland (Ohio, EE.UU.).  El día 9 de mayo 2013,  el periodista catalán, Arcadi Espada afirma: “Si alguien deja nacer a alguien enfermo, pudiéndolo haber evitado, ese alguien deberá someterse a la posibilidad, no solo de que el enfermo lo denuncie por su crimen, sino de que sea la propia sociedad, que habrá de sufragar el coste de los tratamientos, la que lo haga. Este tipo de gente averiada alza la voz histérica cada vez que se plantea la posibilidad de diseñar hijos más inteligentes, más sanos y mejores. Por el contrario ellos tratan impunemente de imponernos su particular diseño eugenésico: hijos tontos, enfermos y peores”.

http://www.elmundo.es/blogs/elmundo/elmundopordentro/2013/05/09/un-crimen-contra-la-humanidad.html

Hay libertad, se puede opinar y decir lo que quiera. Pero, ¿Con qué derecho se atreven a  juzgar estas lumbreras, tanto a los padres a quienes llama “criminales” como a los hijos, a quien llaman “monstruos”, “tontos””enfermos” y “peores”? ¿Es que ellos son mejores, están siempre sanos y son guapos? Como diría el periodista Aberasturi, con  un hijo con síndrome Down, “¿con qué base científica? ¿Con qué permiso?” lanzan esas pellas de basura en forma de adjetivos, sin el menor respeto, tarados y averiados a quienes no piensen como ellos.

No son los únicos. Ahí tenemos a Oscar Puente alcalde socialista de Valladolid, para quien “los hijos deformes” no merecen vivir.

 Llevo escritos más de 400 artículos, sobre el tema del derecho a la vida. Pero no voy a responder a “alguien” tan importante y clarividente como Arcadi o Puente. No porque sea más por estar más altos,  porque como dice mi paisano Revilla “Nadie es más que nadie”. Pero les voy a poner ante el espejo;  ante la vida real, que no admite vuelta de hoja. Voy a dejar que  responda un periodista y además profesor, pero “bajito”. Alguien que tiene la suficiente humanidad y el suficiente humor para pensar que “Nadie es perfecto”. Alguien que sabe mucho de esfuerzo y superación. Me refiero al autor de un un best seller, del que ha vendido más de 5 millones de ejemplares. No creo, pues, que sea un “don nadie” ya que acaba de presentar también una película, basada en su propia vida, titulada igualmente “Nadie es perfecto”(2013). Me refiero a Hirotada Ototake, uno de los personajes más famosos y admirados hoy día en Japón. Alguien leído también en Corea del Sur, Taiwán y China y se han publicado traducciones al coreano, al cantonés y al mandarín.

 Ototake ha tenido el coraje de escribir la historia  de un muchacho- él mismo-, con una valentía increíble y una capacidad de disfrutar de la vida capaz incluso de cambiar la sociedad. Ese espejo es al mismo tiempo, un estímulo para entender cómo el aceptar las imperfecciones de otros puede hacer nuestras vidas menos imperfectas.

Nació el 6 de abril de 1976,  sin brazos ni piernas en una sociedad sumamente respetuosa, recatada y proteccionista. Una sociedad que esconde el llanto, que oculta a los discapacitados y a los mayores. Vano intento de ocultar el sol. Tanto que “temiendo que su madre pudiera sufrir una postración nerviosa al ver los defectos físicos de su hijo, los médicos no le dejaron ver al niño durante un mes. “Es encantador”  dijo su madre al tenerlo por primera vez en brazos. El temor de los médicos y la naturalidad de la madre marcaron su devenir.

Fue enviado desde pequeño a escuelas públicas, y todos (padres profesores y compañeros) se esforzaron en que participara en todas - o al menos en la mayoría- de las actividades escolares. Él fue quien más se esforzó, en todo, desde subir las escaleras a no aceptar sobreprotección. Consiguió pericia y habilidad para manejar la pelota practicando baloncesto, fútbol, e incluso beisbol con sus compañeros. Manejaba la pelota con sus cortos muñones. De la misma forma, mas tarde practicó el remo. Pero sobre todo, consiguió admiración, normalidad,  “aceptación  y respeto hacia los que somos diferentes”.

Quienes le conocen lo definen  como “una explosión de energía en un cuerpo limitado”,  es”una persona que se ha sobrepuesto a su destino”, es “uno de nosotros”.

Cuando pudo escribir sobre la repercusión en los demás de su propio esfuerzo en el deporte decía “cuando lo hago estoy dando una lección: no importan las dificultades, nunca deben rendirse”. No le gustaba la compasión, o las frases como”pobre, mira con lo que tiene que vivir”. Siempre apreció el trato normal. Siempre se esforzó en  ser alguien que disfruta con los compañeros, como un chico normal, ríe y se divierte y participa incluso en las fiestas. Alguien normal que tiene capacidades diferentes.

En 1998  publicó Gotai Fumanzoku (Nadie es perfecto) donde narra su experiencia de vivir con una enfermedad congénita. Dicen que es el tercer libro más vendido en Japón. Ha sido traducido al inglés.  Se graduó en Ciencias Políticas y Económicas” en el año 2000. Hoy es un famoso periodista deportivo. A partir de abril 1999 trabajó como co-presentador de un programa de noticias de televisión en horario estelar. Y obtuvo la plaza de profesor en 2007. Imparte clases a niños (de primero a sexto). Disfruta enseñando y destacando la importancia de la educación.

Oto, comentando el éxito de su libro y el número de lectores dice: “Supongo que, como la mayoría de la gente no está acostumbrada a tratar con personas discapacitadas, muchos se sorprenden al ver lo normal que ha sido siempre mi vida”.

El criticó el sistema educativo japonés, afirmando que  los niños son "protegidos de decepciones y no se les fomenta a asumir desafíos".  Puede vérsele caminar  por la calle como un hombre normal. Incluso su silla de ruedas, tiene que ponerle a la altura de los demás, para hablar mirando a los ojos.  Su actitud ha obligado a que el gobierno elimine muchas barreras arquitectónicas y accesibilidad a las personas con alguna discapacidad. Se ha impuesto una meta social: un entorno sin barreras.

En sus conferencias,  suele hacer hincapié en que todos debemos seguir nuestros sueños y asumir nuevos retos, a pesar del miedo al fracaso. Hay que empezar por cambiar la forma de ver y enfrentarse a la discapacidad.  Se necesita valentía y energía constante para superar discapacidades, pero también para cambiar el conocimiento de los que te rodean. Hay que concienciar a los padres,  a los maestros no convencionales, a los políticos y medios de comunicación, para que sacudan el status quo rígido. Hay que sacar provecho de las limitaciones y defectos que todos tenemos.

La sobre-protección en Japón y en el mundo, es un error, de izquierdas y de derechas. Puede que, los “perfectos” consideren a alguien, imperfecto, incapaz de disfrutar de la vida y prescindible. Históricamente de ahí al aborto o la eutanasia, hay sólo un paso. Siempre se buscarán razones  en un interesado ajuste de cuentas económico a costa de los seres más indefensos, según sugiere Arcadi. 

¡Ojo, con  los perfectos!  Es mejor  reconocer, como  Oto-chan que: “Nadie es perfecto”. Trabajo duro, humor, versatilidad y un enfoque optimista de la vida son tan valiosos como las extremidades, o cualquier otra carencia. ¿O no? ¿Entonces quien tiene derecho a eliminar a quien tenga alguna enfermedad, malformación o defecto? ¿Sigue usted pensando que Oto no debería hacer nacido? ¿Es una carga o un ejemplo para la sociedad? 

POST DATA:  Me permito recomendar el artículo de Javier  Romañach, titulado Los "tontos": http://www.larazon.es/detalle_movil/noticias/2263830/sociedad/los-tontos

PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES, BLOG LA TANGENTE:  11-05-2013:   

       http://www.elheraldodelhenares.es/pag/noticia.php?cual=17489 ; LA ESFERA DIGITAL, BLOG A FAVOR DE LOS VALIENTES: http://www.laesferadigital.es/blogs/a-favor-de-los-valientes/906--nadie-es-perfecto-con-vida-cualquier-reto-2-.html ; BITACORA DE BELMONTE en CiViCa: 12-05-2013: http://www.investigadoresyprofesionales.org/drupal/blogs/belmonte:Blog de HO, FARCOSALUD: 13-05-2013: http://blogs.hazteoir.org/farcosalud/2013/05/13/%e2%80%9cnadie-es-perfecto%e2%80%9d-con-vida-cualquier-reto-2-2/.