El
crecimiento personal transforma el mundo y lo engrandece. No hay casualidades.
El progreso personal implica comportamientos sociales responsables que son la base del cambio.
Evidentemente
no es, ni puede ser, algo automático. Está al alcance de todos, porque en todos
está la capacidad de introspección; pero descubrir y potenciar lo mejor que hay
en nosotros exige, primero, ser conscientes y luego, una actitud interior capaz
de vivirlo personal y socialmente.
Esconderse
en la multitud, las manadas, las bandas, el ruido o la noche, para actuar desde el
anonimato, puede ser una forma de eludir la responsabilidad. ¿Miedo?
¿Desconocimiento? ¿Mentira? Es lo que hay. "Por donde mires: el que no miente, enmierda.
Y a eso han degradado la política, y el ánimo social, y la indignación cívica,
y hasta el tedio. Porque todo vuelve a parecerse demasiado, una y otra vez.
Porque exigimos altura, conciencia, responsabilidad y a ellos les suena a
«Poesía eres tú»" (Antoni Lucas, Poesía
eres tú,
http://www.elmundo.es/opinion/2018/09/21/5ba3d840e5fdea65208b4677.html)
Ser
conscientes de lo que somos, tenemos y queremos. No quiere decir que implique esfuerzo. Auto
disciplina, sí; priorizar valores, también. Pero sobre todo confianza en la
vida y en sí mismo. Hay que partir de lo
que somos; saberlo, y aceptar que es posible. Todo tiene sentido. Todo es un
regalo. Si confiamos y lo aceptamos, ya
lo estamos disfrutando. El potencial es infinito tanto en el ser, como en el
conocer y en el actuar.
El cuerpo
es importante, pero solo es una parte de lo que somos. Se pone mucha
importancia en su cuidado y la belleza corporal. Pero a veces se olvida lo
esencial. El cuerpo que hoy tenemos sí tiene fecha de caducidad. Pero somos algo
más que el cuerpo y los sentidos que nos
permiten experienciar sensaciones y emociones; somos espíritus encarnados en
crecimiento y autotrasformación. La muerte no existe. La vida no termina con la
muerte. Mi ser no tiene fin. Como el universo, el ser de cada uno, se expande
hacia el infinito y hacia la luz.
Sólo se
contrae, por el miedo, el ego, y la falta de empatía.
El miedo
es libre, pero en el caso de temor a la muerte, sin fundamento. Podemos vivir y
actuar conscientemente, con corazón y esperanza. No se trata de enjuiciar a
nadie. Pero no todo vale, ni es lo
mismo, ni da igual.
Ante las situaciones que nos venden los medios
de comunicación, los políticos, o los dueños del mundo, hay que saber distinguir
el silencio, de los gritos; la verdad, de la mentira; la compasión, del buenismo;
lo positivo, de lo negativo; lo material, de lo espiritual; el valor del sí, y
del no. La paz es clave.
Si fuera posible hay que leer o escuchar
a los sabios. Lo que han escrito y lo que han vivido, puede ayudar mucho en
momentos de confusión y ruido, personal y social.
El problema es
que "el error no se manifiesta tal
cual es, por temor de que, apareciendo desnudo, sea reconocido; sino que, adornándose
artificiosamente de un vestido de verosimilitud, obra de modo que aparece a los
ojos de los ignorantes, más verdadero que la verdad misma" (Ireneo de
Lyon). Hay ideologías y personas que saben explotar ese colorido vestido de
verosimilitud, y arrastran incautos. Cuando uno se da cuenta, viendo lo que hay, es
mejor... desconectar.
En todo caso, no es más cierto lo que dice
quien más grita o dispone de más medios para repetirlo. El interés y el miedo
se adornan bajo la capa del egoísmo y el engaño. Hay que estar atentos. El
crecimiento, el trabajo y el progreso, implican comportamientos personales y
sociales responsables, verdaderos y auténticos. Y comienzan en uno mismo. Sería bueno
saber cómo actuar desde donde estamos. No por miedo, sino por agradecimiento y
por amor. En una palabra, lo contrario del egoísmo.
Algunos se creen o aparentan sabelotodo, porque su ego siempre cree tener razón; es insaciable, su ego hace cualquier cosa
para no pasar desapercibido; es interruptor,
no escucha e interrumpe a todos; envidioso,
que no soporta o minimiza el éxito ajeno; le gusta el autobombo, o echarse flores, cuando los otros no le aplauden; es
el jinete, dispuesto a subirse al
caballo ganador de otros, a sus
proyectos o sus vidas porque su ego no sabe perder y no es capaz de ganar sin
que se cambien las reglas; manipulador,
el ego de quien siempre busca que las cosas le beneficien o se pongan a su
favor es capaz de pactar con el diablo. La violencia, la tiranía y el engaño
pueden alzarse con el poder y creerse el centro del universo, pero no saben
mandar, ni son capaces de rodearse de equipos competentes, incapaces de decir
la verdad.
La clave: dejar ir lo que no ayuda y
potenciar la energía de lo que somos.
Einstein dijo
algo que se debía tener en cuenta:
"O estamos llenos de amor, o estamos llenos de miedo”. Hemos dicho algo sobre el "miedo", pero es importante ver el lado positivo. Porque... como
veremos, no vale todo.
Einstein es conocido mundialmente por
algo que la mayoría de los humanos no entendieron cuando la propuso:"
la teoría de la relatividad".
Einstein
escribió durante su vida cerca de 12.300 cartas a familiares, amigos y compañeros de trabajo. Según Christoph
Lehner, del Instituto Max Planck de
la Historia de la Ciencia, la mayoría de ellas son accesibles a los investigadores.
Pero, como suele suceder con personajes
sabios, santos o famosos, hay quien les atribuye hechos, dichos o escritos que
podrían ser suyos, pero no lo son. A
Einstein le atribuyen una carta a su hija Lieserl que no es suya aunque ...empiece "querida
hija"... y termine: "tu padre. Albert Einstein".
La carta está en Internet, incluso en
Youtube. Parece escrita por alguien anónimo que conoce su vida y su obra, pero parece
más un maestro/a de auto-ayuda, que un padre científico. Las redes sociales se prestan a estas farsas y
con buena intención incluso se hacen virales. Pero si no escribió la carta, las
frases no son suyas.
Se habla de la fuerza universal del amor y su
mensaje podría resumirse en estas líneas:
"Esta fuerza lo explica todo y da
sentido en mayúsculas a la vida. Cuando aprendamos a dar y recibir esta energía
universal, querida Lieserl, comprobaremos que el amor todo lo vence, todo lo
trasciende y todo lo puede, porque el amor es la quinta esencia de la vida. El
amor es la única y la última respuesta".
http://dicenqueyodije.blogspot.com/2016/03/la-carta-que-einstein-no-escribio.html
(Ver video y juzguen)
https://youtu.be/AaVVCIYVQ90
Descubrir qué es el amor, es la
gran pregunta cada día.
Poner atención, encontrar la
respuesta y vivirlo es tarea de toda la vida. Para eso estamos aquí. Y... eso nos vamos a llevar. Luego, importa y
mucho.
Los Maestros de todos los tiempos, en
todas las culturas y en todas las religiones han tratado de ayudar a quienes
caminamos por la vida, mientras estamos
aquí y ahora. Sus enseñanzas unas veces
son orales y se trasmiten así de unos a otros. Como no todos los testigos
ofrecen el mismo grado de fiabilidad, en algunas culturas y creencias, -cuando fue
posible- pusieron las enseñanzas del Maestro o Maestros por escrito, en pergaminos,
libros, pinturas o lo esculpieron en
piedra.
Y, ¿qué hemos aprendido? ¿qué sabemos?
¿qué responderíamos si alguien nos pregunta?
Han hecho esa pregunta a alguien especialmente preparado. Y...seguro que
mucha gente prefiere verle y escucharle, y no que yo resuma lo que dice. Escuchen preguntas y respuestas , con Neus Miró y Emilio Carrillo.
Gracias.
https://youtu.be/BhiY9ISilug
José Manuel Belmonte
ESPERANDO LA LUZ
22-09-2018
http://belmontajo.blogspot.com/2018/09/amor-o-miedo-y-ii.html
EL HERALDO DEL HENARES 24-09-2018
https://www.elheraldodelhenares.com/op/amor-o-miedo-y-ii/
CIVICA 11-10-2018
http://civica.com.es/blog/amor-miedo-ii/
Querido José Manuel! Acabo de leer este maravilloso texto!Sólo darte las gracias por ponerlo delante de mis ojos...fantástica enseñanza!Un fuerte abrazo y feliz domingo.
ResponderEliminarMarina PF.
Hola buenas noches Marinita:
ResponderEliminarGracias por estar ahí. Siempre encuentras algo útil en los escritos. Es una actitud mental positiva que te llena de luz para descubrir algo bueno de lo que escribo, y entonces las coincidencias existen.
A quienes escribimos se nos exige decir sencillamente lo que creamos, con toda sinceridad y dando lo máximo que podamos. Es muy exigente, no es fácil, pero confiando, me parece que lo intento. Una vez escrito, lo dejo "a la buena de Dios", o "que sea lo que Dios quiera", como se suele decir.
Unas veces llegará al fin del mundo, y otras será menos visto o menos leídos. Agradezco lo uno y lo otros, porque no escribo para alagar el ego, sino por si lo que escribo puede tener alguna utilidad para alguien(el número no me preocupa).
Así que, gracias de corazón.
Un fuerte abrazo.
José Manuel