martes, 21 de mayo de 2013

1.126 muertos, pero los sindicalistas a lo suyo


          Los equipos de rescate han recuperado los cadáveres de otras 120 personas de los escombros del edificio Rana Plaza, que se derrumbó el pasado 24 de abril en el distrito de Savar, cerca de Dacca, en Bangladesh. El número de víctimas se eleva al menos 1.126, según informa el portal de información Bdnews24.        
                               Sin embargo, los trabajadores que han sobrevivido al derrumbe, unos 2.500 según la agencia rusa RIA Novosti, han asegurado que en el momento del colapso había unas 5.500 personas trabajando en el edificio. El edificio se incendió y derrumbó, por causas que aún se desconocen, con miles de personas en su interior. Las ocho plantas del edificio  albergaban fábricas textiles,  mercado y tiendas de electrónica.

          Los talleres textiles pertenecían a las compañías Phantom Apparels Ltd, New Wave Style Ltd, New Wave Bottoms Ltd y New Wave Brothers Ltd que manufacturan prendas de vestir. Entre sus clientes está Benetton, Wal-mart, y Disney, entre otras firmas occidentales.

          El director de la Policía Industrial Mostafizur Rahmán acusó a los propietarios de las fábricas de ignorar las grietas que aparecieron en el edificio el martes. Según parece, la Policía Industrial pidió a los dueños de las fábricas que paralizasen las operaciones tras descubrirse las grietas, dijo Rahmán. "Pero ignoraron nuestras directivas y decidieron abrir sus unidades hoy", continuó el policía.

          Trabajadores que resultaron heridos en el accidente acusaron a los responsables de las fábricas de obligarles a trabajar. "Ninguno de nosotros quería entrar al edificio hoy, pero nuestros jefes nos forzaron", dijo Nurul Islam, uno de los trabajadores heridos, al portal de noticias Bdnews24.com.

          “El dueño del edificio comercial, Mohammed Sohel Rana, cinco propietarios de fábricas y talleres textiles y dos técnicos municipales han sido detenidos y acusados de negligencia, construcción ilegal y de persuadir a los empleados para que acudieran a su puesto de trabajo, a pesar de que un día antes habían aparecido grietas”. Total…nada.

          Una tragedia, una más, que golpea la industria textil bangladeshí, ya que  hace cinco meses un incendio en una fábrica causó 111 muertos, que manufacturaban productos para la compañía estadounidense Wal-mart.

          Trabajadores y en mucho mayor número trabajadoras, han muerto en su lugar de trabajo, ante la indiferencia general. Nuestros sindicatos, nuestra clase trabajadora,  las feministas de pacotilla, a lo suyo. A los pocos días de la tragedia, se celebra el famoso día del trabajo, el 1 de mayo. ¿Y Qué? Como si todo fuera normal.  Nadie ha dicho una palabra, ni un recuerdo para los fallecidos y sus familias. Estos subvencionados, al igual que los políticos subvencionados, y sus miles de asesores (de izquierda, de centro y de derechas) han sido incapaces de tener un gesto de grandeza con esos trabajadores, de otro país.

          Sin que la gravedad del desastre fuera de estas proporciones, un acontecimiento similar incendió el mundo laboral. Han pasado 102 años.  El 25 de marzo  de 1911, murieron 146 mujeres y 71  resultaron heridas en un incendio en la fábrica de camisas Triangle Shirtwaist de Nueva York (foto adjunta). Un edificio de 10 plantas. Los trabajadores y los sindicatos de entonces en América y en Europa, fueron capaces de poner el grito en el cielo, movilizaron a la sociedad y obligaron  a modificar la legislación laboral en estados Unidos, y las condiciones de trabajo en casi todos los países.  Aquel «pánico horroroso» sacudió la conciencia mundial
          Parece mentira que eso se haya olvidado. Ese mismo año de la tragedia, 1911,  nació el Día internacional de la Mujer Trabajadora.  La catástrofe, les llevo a la oportunidad de tomar conciencia del derecho de la mujer al trabajo en condiciones de igualdad y dignidad,  y de paso también a otras  mejoras de derechos políticos y sociales. Claro que, aquella lucha por la dignidad y la justicia, tuvo una bandera: la libertad, enarbolada por la mujer. Eso las condujo, primero, a reivindicar el derecho al voto, y luego,  a ocupar el espacio al que tenían derecho.  Entonces tenían valor y valores.
         Hoy, en muchos países de Asia, África y América Latina estamos viendo condiciones de trabajo de verdadera esclavitud. Incluso los niños son explotados, en trabajos insalubres, en horarios infernales y con salarios de hambre. Lo sabemos los ciudadanos de a pie, lo saben los gobiernos, y lo saben las organizaciones Internacionales. También lo saben, por supuesto, los sindicatos (los de nuestro país y los de todos). ¿Han dicho algo? ¿Han sacado a la gente a la calle para presionar a los gobiernos para que presionen internacionalmente a Bangladesh, y lanzar un aviso a otros gobiernos que permiten iguales o peores condiciones de trabajo?
           De ésto último, tan sólo un ejemplo: Camboya. Muchos padres se ven obligados a abandonar a sus hijos todo el día encerrados en casa, para poder ir a trabajar a la capital y obtener un sustento trabajando en lo que sea. De ellos algunos afortunados van a la fábrica de calzado. Allí se ven obligados a trabajar 12 horas diarias, por menos de 60 euros al mes.  
  http://www.larazon.es/detalle_normal/noticias/2361155/sociedad/encerramos-a-los-ninos-en-casa-con-llave-porq
          Sabemos, y ha quedado demostrado una vez más, que esas condiciones infrahumanas de trabajo, las imponen las empresas. Y La mayoría de esas empresas, son empresas multinacionales que van precisamente a esos países a pagar “esos” salarios miserables, para que  los consumidores occidentales luzcamos esas prendas de moda, esos zapatos y esos complementos, no a “un precio justo”, sino a un precio que mata. ¿Han hecho algo? ¿Han mejorado las condiciones de trabajo? ¿Hay indemnizaciones?
          Hoy, 21-05-2013, he recibido este mensaje en mi ordenador: "Cientos de mujeres de Bangladesh han muerto quemadas o aplastadas ¡mientras producían "nuestra" ropa! En pocos días, grandes empresas del mundo de la moda firmarán un acuerdo, pero queda por ver si apoyarán un eficaz código de seguridad, o resultará una mera maniobra de "relaciones públicas". Si un millón de nosotros logramos que los Directores Ejecutivos de H&M y GAP respalden un acuerdo capaz de salvar vidas, los demás les seguirán”. http//wwwavaaz,org/es/gap_enoough_fashion_vicims_global/?bChVobb&v=25003 
          Luego, algo se podía hacer. Los miserables paniaguados, no son capaces de denunciar nada, de reivindicar nada, ni de acordarse siquiera de los muertos. Convertidos en especialistas del “agit-prop”, no saben lo que es defender a los trabajadores. Con subvenciones a dos carrillos no se puede abrir la boca. Lo demostraron en la etapa anterior. Y en etapa actual lo único que les interesa es que vuelvan los suyos, es decir, los que  les pueden mantener sin dar un palo al agua. ¿Cómo van a tener una mirada altruista más allá de su jardín? Es difícil que quien no respeta la vida tenga valor de preocuparse de los muertos.

           Pero seguro que la gente honrada, de izquierdas, de derechas o de centro, y la gente a quien le importan tres cominos esos posicionamientos localistas,  puede denunciar a esas empresas. En su interior lo han hecho y apoyan a esas criaturas explotadas, y tienen un recuerdo por sus compañeros muertos. Por dignidad, aunque no sea más que por dignidad y porque son humanos y son trabajadores.

          Somos ciudadanos del mundo, el dolor y la injusticia no puede ser ajenos.No podemos guardar silencio, ni cerrar los ojos, como si nada hubiera pasado. No podemos fingir. Tenemos un futuro común. Muy posiblemente Occidente, nuestro país, e incluso alguien de familia se hayan lucrado de ese sudor y de su sangre.  Ellos, los fallecidos gritan. Las naciones cobardes, y quienes “no se implican”, ni mueven un dedo para que la situación cambie, es posible que vean a sus hijos en las mismas o peores condiciones.

          La crisis, va para largo. Seis millones, en España, no tienen trabajo. ¿Estamos mejor que hace un siglo? Si la tragedia de 1911 despertó la conciencia social, y la de ahora, mucho mayor no lo hace, ¿no será que está dormida, anestesiada por el capital, o que hayamos perdido la conciencia en este poco tiempo? "Fingí que no sabía. Y ahora queda mi conciencia insomne noche y día", escribió F. Mayor Zaragoza. Será un placer suscribirlo, por sentir que aún la tengo..
PUBLICADO EN: BITACORA DE BELMONTE EN CiViCa, 22-05-2013: http://www.investigadoresyprofesionales.org/drupal/content/1126-muertos-pero-los-sindicalistas-lo-suyo; EL HERALDO DEL HENARES: BLOG LA TANGENTE, 25-05-2013: http://www.elheraldodelhenares.es/pag/noticia.php?cual=17627.

10 comentarios:


  1. En mi país todo queda impune. Los familiares de los que murieron asfixiados y aplastado en el incendio del SUPER mercado""YCUA Bolaños""" , a causa de que los dueños cerraron las puertas,para que nadie los robaran ,desde hace 13 años claman justicia. Se cerro el caso , sin condenar a nadie. A los empleados también se les obligó a no dejar sus puestos, y quedaron calcinados ,mientras los patrones corrían con lo recaudado. Es tan triste saberlo, y ver que no somos capaces de defendernos contra la indiferencia y poder de de las personas que por tener mas dejan de ser humanos...¡¡¡Duele decirlo pero hay que decirlo!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Conozco algo de la masacre que sufrió tu país hace más de 100 años, que no ha sido reparada, ni cerrada la herida en un Tribunal Penal Internacional, tal vez por desidia de vuestros gobernantes.
      La muerte del Super, tampoco han querido esclarecerla, al igual que otras. Hay muchos intereses. Pero la gente no olvida.
      Hay que decirlo. Gracias, por contarlo.
      José Manuel

      Eliminar
  2. Gracias Josema , es tan triste todo esto. Y CUANTA RAZÓN ENCIERRAN TUS ESCRITOS ...
    Rossy

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Rossy.
      Es un placer saber de tí que siempre estás ahí como un faro.
      Un fuerte abrazo. Bendiciones.
      José Manuel

      Eliminar
  3. Si amigo, cuan culpables seremos todos aquellos que callemos, o volvamos la vista. ¿Es que solo nos importa tener todo aquello que podemos adquirir a bajo coste, de dinero, que no de vidas? Que Dios nos mueva a mirar a esas personas como hermanos, y sepamos defenderlos, como personas que son, y no dejar que la esclavitud campe a sus anchas, y hacer como si no fuera con nosotros.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Emilia.
      Tu gran corazón siempre busca caminos para la bondad y para llegar a ser un poco más humanos.
      Lo que pasa ahí afuera, si que va con nosotros, y por eso tú, tu asociación, y tantas personas buenas, si se implican.
      Gracias por estar ahí
      José Manuel

      Eliminar
  4. Estas tragedias son como las estadisticas, pero el corazón se nos conmueve, ante estsos hechos.
    Una oración por sus almas

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cualquier persona que pierde la vida, por una injusticia o por una situación de injusticia, en el país que sea,no es un número de una estadística, es un ser humano.
      Eso es lo que nos tiene que poner en pie para cambiar la situación, para que haya condiciones de trabajo de higiene y de seguridad,salarios justos y para que los familiares de las victimas sean compensados.
      Gracias, por tus amables palabras, Anónimo.
      Un abrazo,
      José Manuel

      Eliminar
  5. Hola Jose Manuel.Una vez mas tu oportuno articulo nos hace reflexionar sobre la triste y preocupante situación que padecen esos países, pero no esperes nada de esos que dicen que son los defensores de los trabajadores - los sindicatos - porque siempre han ido y van a lo suyo, a sus beneficios particulares, no tienen solidaridad con nadie, bueno si con ellos mismos y la palabra dignidad desaparecida de su vocabulario, vamos que ni la conocen.
    No lo dudes que tenemos una sociedad, dormida, anestesiada, cobarde, sin justicia, sin estimulos, falta de memoria_...... y con lo peor la perdida de muchos de los valores que teníamos los españoles como el esfuerzo, el sacrificio, la honradez, la verdad, el compañerismo y tantos y tantos que actualmente están en deshuso _.Personas como tu hacen recordarlos y demostrando que hay otra sociedad que esta viva y con sentimientos, mucho animo y adelante, un saludo, angel

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Ángel.
      Gracias por tus palabras. Creo que todos podemos hacer un poquito más, cuando se trata de situaciones injustas que hay que cambiar. Nos va la vida en ello.Somos todos y cada uno los que debemos cambiar, tomar conciencia y transformar la sociedad poco a poco.
      Un abrazo, porque personas con tu sensibilidad contagian.
      José Manuel

      Eliminar