martes, 7 de octubre de 2014

Los miserables, los solidarios y los Down.

          Hay miserables que madrugan para tener más tiempo para hacer algo grande, y colgarlo en Internet. Se creen con legitimidad para burlarse del mundo y reírse de quien se cruce en su camino. Son enfermos.                                       Su ocio es el antojo y el capricho de su miseria humana. Cuando encuentran alguna víctima inocente y vulnerable, ponen su entusiasmo perverso en hacer daño.                                         
          Me refiero a la noticia que daba La Tribuna de Valladolid y otros medios de comunicación, la semana pasada. ”Las investigaciones comenzaron a partir de una denuncia interpuesta en una comisaría de Valladolid porque Bachiller estaba siendo víctima de insultos y trato vejatorio a través de un perfil falso creado en una red social, a su nombre y con una fotografía suya, en el que se realizaban comentarios ofensivos por tratarse de una persona con síndrome de Down”.

          Tras la investigación “Agentes de la Policía Nacional han detenido en Segovia a dos jóvenes de 23 y 24 años como presuntos autores de un delito de injurias graves con publicidad a través de Internet ya que crearon un perfil falso de Ángela Bachiller, la concejal con síndrome de Down”.

          No es de extrañar, que en un país donde cada vez se ven menos niños Down, y donde los políticos anestesian a la sociedad, con el “derecho” a la “salud sexual y reproductiva” la vida pierda interés, valor jurídico y dignidad. La ignorancia y la falta de valores es ya un mal endémico desde la familia y la escuela.

        La desaparición paulatina de los Down, “condenados a muerte por diagnóstico”, según escribí el 27/12/2011, es una catástrofe. Los inocentes han muerto siempre por miedo y/o capricho de alguien. Por la venganza de tiranos, por  miedo y cobardía  o por  “competir con Dios” en dar y quitar la vida. El “supuesto derecho” es un artificio ideológico legislativo que se opone al sentido común  y fomenta la ignorancia y la discriminación por razón de enfermedad o anomalía.

        Los inocentes, tienen todo el derecho a vivir. Pero ahora tienen un peligro añadido: la ciencia. La complicidad del médico y el miedo/capricho de los padres. Se dispone de tecnología capaz de servir a la salud tanto en el diagnóstico como en el tratamiento. Pero en la práctica, estos avances están sirviendo para condenarlos a muerte. Los papás, “beneficiarios” del informe médico…no están capacitados para asumir un diagnóstico que no consideran “normal”. Tiene miedo. Los hospitales, los comités clínicos y la Asistencia Social, carecen de protocolos de ayuda a los padres,  para asumir que su hijo puede ser Down.
           Por eso, algunos ginecólogos se han negado a realizar el “cribado”, porque en el 90% de los casos de diagnóstico de malformación Síndrome de Down, los padres deciden el aborto al hijo. Por consiguiente la condena a muerte de un inocente arranca del diagnóstico, y de la política permisiva del “supuesto derecho” al aborto legal. En este caso le llaman aborto eugenésico. Para esos abortos no hay límite de tiempo. Por eso cada día, se ven menos niños o niñas Down.

           “Cuando ideología y negocio van de la mano, no admiten oposición ni cortapisas y sus intereses se imponen a golpe de violencia institucional y coacción a las conciencias”, dice en su artículo, De vértigo, el Magistrado José L. Requero,

          ¿Extraña que, en este contexto social, haya malnacidos como esos dos sujetos, de 23 y 24 años que se burlan, insultan o vejan a una chica con síndrome  de Down que además es concejal en un ayuntamiento?

           El pasado septiembre escribí, “La Solidaridad a cubos”, sobre el ELA. No hay suficientes medios para investigar y atajar esa temible enfermedad. Pero la necesidad también exige solidaridad con los Down.
         La Fundación Síndrome  de Down ha celebrado el 5 de octubre 2014 la IV Carrera Down, en el marco del 25 aniversario de Down Madrid. El evento ha contado con la participación de más de 3.500 corredores, así como con el seleccionador nacional de fútbol, Vicente del Bosque, quien ha dado la salida por cuarto año consecutivo, como padrino de la competición. Los famosos ayudan.

           Pretenden que se siga investigando esa anomalía para poder curarla. Son más luchadores quienes tienen o conocen a familias con algún hijo Down. Y el primer paso, como dice el Diario Milenio, deben ser los  Programas de apoyo a las embarazadas para reducir el número de abortos.

         El segundo paso es, la investigación. Desde que Jérôme Lejeune, en 1958, con 32 años, descubrió la anomalía cromosómica en los humanos: la trisomía 21, pensó que los niños lo merecen todo. Quería devolver la humanidad y  a los padres el orgullo de estos niños. Su Fundación sique apoyando a los Down.

        Ha pasado más de medio siglo. Lo que se anunciaba como fuente de alegría  terminó para Lejeune mismo en una catástrofe. Por oponerse al aborto,  le negaron el Nobel. No le importó. Ni él se rindió, ni se ha dicho la última palabra. Lo peor es que su descubrimiento ahora se utiliza contra los niños. Pero hay que avanzar.

           De hecho los científicos ya han logrado silenciar el cromosoma que produce el síndrome de Down. Han logrado corregir el cromosoma en células madre con el síndrome, cultivadas en laboratorio. Lograron silenciar una de las tres copias del cromosoma 21 que, en lugar de las dos habituales, causa el síndrome de Down. Lo hicieron en células madre pluripotenciales inducidas (iPS), obtenidas desde células adultas de una persona con el síndrome. “Ahora tenemos una herramienta poderosa para la identificación y el estudio de las patologías celulares y vías afectadas directamente debido a la sobreexpresión del cromosoma 21”, dijo Jeanne Lawrence, bióloga celular de la Escuela Médica de la U. de Massachusetts en Worcester (EE.UU.), en un comunicado de la universidad. “Es una estrategia que se puede aplicar de muchas maneras, y creo que puede ser útil en este momento”, agregó en Nature.com.

         Por su parte Dr. Elard Koch, ha dicho que “la aplicación inmediata es interesante para la investigación, para ver lo que ocurre en modelos experimentales en animales”. Hasta que se encuentre un tratamiento para los humanos, pasará tiempo, pero lo importante es que haya medios, y que la investigación  no se detenga.
         El doctor Koch, indica que “se trata de un gran avance, que se suma al de otro grupo de investigación en la U. de Washington (EE.UU.) que logró eliminar el cromosoma sobrante desde una célula (también en laboratorio). Sin embargo, falta mucho por investigar antes de que se transforme en una terapia, sobre todo en la experimentación animal, antes de iniciar tratamiento en personas”.
        Con medios, se podrá seguir avanzando. Se están abriendo caminos de esperanza. Gobiernos, Instituciones y particulares debemos apoyar la investigación.

         Los hijos dan a sus padres y a la sociedad, más de lo que reciben. Tener un hijo Down no es un error. Los hijos Down también son un don. Habrá que estudiar ese cromosoma, no matarles por tenerlo.  Su vida tiene un propósito y, todo lo que hagamos para respetar y mejorar su vida, redundará en beneficio de todos. Sus metas de trabajo, capacitación y progreso no tienen límites. Lo que más necesitan es, cariño. Y eso es lo que ellos dan cada día. Esa realidad es igual en todos los países.

Nota:
Adjunto enlace de la web con el lema de la Manifestación para el 22N

 http://www.cadavidaimporta.es/



PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES, Blog, LA TANGENTE, 07-10-2014:
http://www.elheraldodelhenares.es/pag/noticia.php?cual=22853;
 BITÁCORA DE BELMONTE EN CIVICA, 11-10-2014: http://www.investigadoresyprofesionales.org/drupal/content/los-miserables-los-solidarios-y-los-down

6 comentarios:

  1. Ojalá algún día la ciencia ayude a estas personas a mejorar su calidad de vida y a erradicar este mal, pero mientras no permitamos la limpieza de la "raza" con crueles asesinatos. Y ojalá le caiga duramente el peso de la justicia a esos dos mal nacidos. un abrazo

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    1. Hola releante:
      Tengo tanto aprecio a estas personas maravillosas, tenga la edad que tengan que, una vez más he tenido que salir en su defensa. Creo que se las discrimina ya ante de nacer. Se comete una gran injusticia. ¡Hay que ayudar para resolver los problemas, no eliminar a las personas! Por esa misma regla, en cuanto apareciera una enfermedad... sería el fin de quien la padece. ¡Nadie viviríamos!
      Gracias. Un abrazo.
      José Manuel

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  2. Si amigo .los hijos especiales cambian la vida de los padre y la familia ,para bien,pues nos enseñan el verdadero sentido del amor con su ejemplo ..Bendiciones y un gran abrazo cruzando los mares...

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    1. ¡Que gran madraza eres!
      Tienes a tu lado el gran regalo de la vida. ¿Qué sabe nadie lo que un hijo enseña?
      ¡Casi llegas aquí antes que yo a tu país!
      Un gran abrazo a Josema, también. Bendiciones.
      José Manuel

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  3. Hola Jose Manuel Que alegría me das al leer estas noticias que científicos están investigando con resultados positivos estas enfermedades .Pues como tu sabes mi nieto esta pendiente de algún descubrimiento que mejore su situacion actual. Tengamos fé y la esperanza puesta en Dios para que los Gobiernos sigan apoyando la investigación para poder seguir trabajando y que encuentren los tratamientos correctos .


    De verdad que hay que ser miserable para burlarse o reírse de estos niños o mayores inocentes e indefensos. Son personas cariñosas, sin ninguna maldad y que hay que estar con ellas para comprender y entender muchas cosas y la principal el gran amor y cariño que dan a cambio de nada. Otra vez mas muchas GRACIAS por tu preocupación e interés que tienes con estos casos de exclusión social
    Ángel GS

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    1. Hola Ángel:
      Se refleja un gran corazón en lo que dices. Además hablas de esperanza, porque sabes lo duro que es que no se investigue, y que personas inocentes sufran y también sus familias.
      Estoy convencido que que se irán dando pasos, y que muchas enfermedades encontrarán remedio más pronto que tarde.
      Y ayudar, querer y tratar de que esas personas inocentes sean felices, no es cuestión de generosidad sino de elemental justicia. Tenemos que aprender mucho de esas personas inocentes, como Nico, como los Down, y todas las personas que tienen alguna carencia. Todos, en mayor o menor medida, necesitamos que nos ayuden en un momento dado.
      Un abrazo, y gracias por hacer cuanto haces.
      José Manuel

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