Haber
estado junto a su corazón, nos ha marcado para siempre, y a ellas también. Así
que si se celebra una vez al año, el "Día de la Madre", no puede ser
un capricho comercial, sino un sentimiento de agradecimiento recíproco, que
necesita ser expresado. No importa tanto "hacer un regalo", sino
sentir que "todo sucede por algo", y que el mayor de todos forma ya parte,
para siempre, de la historia viva de cada uno.
1) No corren buenos
tiempos para las madres, ya que la sociedad no apoya la familia.
Desde
hace años en teoría y en la práctica, en medios oficiales y en las
instituciones,-tanto a nivel mundial como nacional-, no se apoya ni la maternidad ni la familia,
sino todo lo contrario como «una necesidad básica de la salud sexual de
mujeres, niñas o jóvenes embarazadas».
De
hecho el 22 de julio de 2021, el Parlamento Europeo
pasa de defender el derecho a la vida de los seres humanos más desfavorecidos,
a considerar el aborto como un, «derecho humano», en el marco de la salud de la mujer.
Y
nada menos que la OMS, en un documento reciente, en lugar de defender el
derecho primordial para el que fue creado ese organismo, (defender la vida y la
salud de todo ser humano), se posiciona por suprimir toda limitación al aborto.
Por eso, Julio Tudela, Director del Observatorio de Bioética de
Valencia, denuncia la doble moral de ese organismo.
Desde
la ideología feminista, no se valora el derecho a la vida, ni al padre y sus
derechos,-que los tiene-, como corresponde, ni se respeta al objetor médico. La
vida y la familia son pilares de la sociedad que los gobiernos deben defender y
apoyar económicamente. Y a las madres solas también.
2) La vida, se burla
de las instituciones, de las leyes
interesadas y los plazos.
A
veces los hijos son maestros y pueden enseñar la realidad de la vida y la
biología, a quien lo quiera entender o aprender. Y lo hacen al superar los
peores pronósticos y desafiar lo establecido, de la forma más difícil y
contundente, por partida doble... en forma de gemelos.
Los
médicos informaron a la madre que estaba sufriendo un aborto espontáneo y que los bebés no sobrevivirían. Les daban 0%
de posibilidades de vida. Pero Harley y Harry, gemelos con 22 semanas,
desafiando las probabilidades negativas...querían nacer.
Su
madre Jade, junto a su marido, contó después: "Tuve una sensación de paz y oré para que lo lograran, que lloraran y
dieran señales de vida, lo cual hicieron. Estoy muy orgullosa de mis bebés.
Hicieron todo lo que nos dijeron que no harían: llorar y sobrevivir".
En
cuanto el equipo médico escuchó el llanto de los bebés en la sala de partos, se
apresuró a atenderlos. "Cuando
Harley dejó escapar el más pequeño de los gritos, la habitación se volvió loca y de repente le ofrecieron
tratamiento. Fue increíble escucharlos llorar, aunque todavía estaba
asustada", recuerda la mamá, en una entrevista con Mirror.
El
Daily Mail -segundo periódico más leído en el Reino Unido- recordaba que
"los bebés nacidos a las 22 semanas no se clasifican como legalmente viables
y, a veces, no se ofrece ayuda médica", porque son prematuros.
Cierto
que los bebés de Nottingham, Inglaterra, llegaron al mundo con el tamaño de una
barra de chocolate y son considerados un milagro en la medicina y están
inspirando a personas de todo el mundo. Con esas semanas y ese peso, los bebés se
están desarrollando muy bien. El 24 de
febrero fueron dados de alta del hospital y están ya en su casa.
Si
los gemelos ya están en casa, ¿habría que cambiar algo en la legislación? ¿Han
llegado tarde los mellizos ingleses y su lección de vida?
Solo
3 días antes, el 21 de de febrero, la Corte Suprema o Constitucional de
Colombia, aprobó despenalizar el aborto
durante las primeras 24 semanas de embarazo (5 meses). Fue aprobado por cinco
votos a favor y cuatro en contra, según Erika Guevara Rosas, directora
para las Américas de Amnistía Internacional.
Tal
vez, a la mamá de los gemelos, algún día le parezcan agotarse las fuerzas o la
paciencia, pero tendrá siempre todo
multiplicado: dos para besar, para abrazar y dos para amar.
3) La madre, lo es
hasta el final.
Desconocemos de qué modo se pueden complementar dos infinitos. También es un misterio el momento exacto de hacerse realidad el ser madre y el ser hijo. Pero es verdad desde entonces, la historia de ser madre y de ser hijo ya son inseparables, distintas y juntas hasta el infinito y más allá.
Las
madres lo dan todo íntimamente desde la placenta. ¡Darlo todo y poderlo dar siempre no es fácil!
Permítanme un inciso, un aviso o mejor una alerta. Lo que hacemos como personas y como sociedad, con plásticos, drogas y demás, influye y es potencialmente dañino. Se ha comprobado que en el lugar supuestamente más seguro, donde las madres guardan y alimentan a su hijo, en la placenta, se han detectado plásticos, o microplásticos, de 5 a 10 micras. Como a veces no somos capaces de entender la magnitud del problema, hay madres que hablan de "Plasticenta: parimos plástico". Según, Jodi Flaws, autora principal del informe Plásticos, EDC y salud: "Se necesita una acción definitiva, a nivel mundial, para proteger la salud humana y nuestro medio ambiente de estas amenazas".
Una madre, cada día de su vida, pregunta a su hijo/a, si algo necesita, ¿Qué puedo hacer por ti? Y antes que responda, ha dicho con los ojos: "¡no te rindas nunca, porque no estás solo, porque yo te quiero!"
Un
abrazo y un beso, como cada día, madre. ¡No estás sola, porque estoy aquí! Sin decirte nada, sabes que te quiero. La vida, nuestra vida, es eso: ¡Gracias! ¡Infinitas gracias!
José Manuel Belmonte
PUBLICADO EN
ESPERANDO LA
LUZ 30-04-2022
http://belmontajo.blogspot.com/2022/04/la-madre.html
EL HERALDO DEL
HENARES 1-5-2022
https://www.elheraldodelhenares.com/op/la-madre/
http://civica.com.es/bioetica/la-madre/
Las madres siempre están.
ResponderEliminarAunque sea desde donde no sabemos.
Abrazo.
Sentimos que están y algún día nos encontraremos.
EliminarOtro abrazo para ti.
Hermoso¡ homenaje, grandes palabras verdaderas 👏 🙌 gracias.
ResponderEliminarNo importan tanto las palabras, como el cariño y la sinceridad de donde brotan. Gracias.
EliminarMuchas gracias por este homenaje a las Madres, feliz día José Manuel, un abrazo grande. Marina.
ResponderEliminarHola Marina, mamá y además abuela. ¡Enhorabuena, porque una madre, es insustituible! Y creo que, aunque no sepamos expresarlo, existe una conexión de corazón a corazón, que es real además de emocional. ¡Feliz día!
EliminarQuerido amigo, muchísimas gracias, por esta bonito articulo, homenaje, a la maternidad y a las madres. Una Madre, como bien dices es alguien que todos tenemos, seamos hombres o mujeres, sin excepción. Todos tenemos un ser maravilloso que nos dio la vida, y son madres aquellas incluso, que por las circunstancias que sean, decidieron acabar con la vida de un hijo. Sólo que son madres de un hijo muerto. Y llorarán amargamente algún día, porque una madre, es solo amor, y ese es su instinto.
ResponderEliminarPor eso un hijo, solo puede por si mismo, dar amor a su madre. Una madre, siempre saca una sonrisa, esté presente o ausente. Lo que está claro es que son inolvidables y entrañables, para nosotros, sus hijos.
En esto, la mujer es única, insustituible, inolvidable, con una dedicación total, arriesgada pero para la que su hijo/a o sus hijos, siempre le dará fuerza, solo con nombrarla y con ser. Con una sonrisa, un beso o un simple "mamá", podrá estar y serlo cada día de su vida, desde la concepción hasta más allá de los limites humanos y más allá de los años y la vida en este mundo.
EliminarAdmiro tanto su extraordinaria alegría y su trabajo de ser madre, que no puedo entender que, debido a la ideología feminista, alguien quiera quitarles ese privilegio. ¡De ellas depende!
Un abrazo, Emilia.
❤️
ResponderEliminarLos tiempos han cambiado tanto y tan rápido que asusta. Tengo la percepción que desde la década de los ochenta (XX), esto de traer hijos al mundo, en líneas generales, se ha convertido en una proeza. Y cuando llegó el siglo XXI. ,mucho más aún
ResponderEliminarLos índices de natalidad en España desde 1975 cuando nació mi hija hasta este año, han bajado a la mitad. Sin embargo a nivel mundial, no para de crecer. Es un fenómeno curioso y para aquellos que son amantes de las nacionalidades identitarias, resulta en un fracaso. Siempre he sido independentista cultural, lo cual significa reivindicar y defender mi cultura autóctona, mientras que no estoy a favor de la independencia militante identitaria. Dicho de otro modo, me gusta más pensar en europeo que en español (y que en catalán por supuesto). Así que con estos índices demográficos y de natalidad, dentro de una o dos generaciones, el presidente de la Generalitat se podría llamar Ibrahím, Hassan o Mohamed, lo cual tiene su puntito cómico.
Pero volviendo a la cuestión principal. Ser padres y muy especialmente, ser madre, es una heroicidad hoy en día, con la flagrante inestabilidad social, laboral, la cultura del divorcio exprés, etc etc.
Aumenta el número de mujeres que deciden ser madres solteras, cansadas de la estupidez y falta de responsabilidad galopante que hay en el género masculino. No generalizo, pero lo de "galopante" es un hecho.
Como dice en el Vedanta (los Rigvedas) la energía del cosmos (Shakti) es femenina. Siempre he tenido a parte de la inevitable atracción sexual, otra atracción magnética por la mujer y lo que representa. Espero y deseo que algún día ellas nos saquen de este atolladero viscoso que es el mundo actual.
Ricard, encuentro muy acertada esa auto definición: " Siempre he sido independentista cultural". Hasta soy capaz de compartirla, apartando las connotaciones interesadas y partidistas, como tu puntualizas. En ese sentido dices: ", me gusta más pensar en europeo que en español". Personalmente, me gusta ser más libre aún, Soy un "ciudadano del mundo", aunque reconozco que últimamente, también va bastante mal.
EliminarLos índices de natalidad "han bajado a la mitad. Sin embargo a nivel mundial, no para de crecer". Estimo que "decrecer" y "crecer", no son incompatible, si las magnitudes son proporcionales. Con mi respeto, el feminismo y las migraciones, dificultan el panorama real.
Tampoco yo creo ser "machista" en absoluto, ni puedo negar la atracción magnética hacia la mujer. Pero reconozco que desde hace siglos, -y no solo ahora- el varón, por méritos propios (en muchos casos) y por el avance de la "ideología" contraria, ha ido perdiendo su verdadero rol familiar y social.
Y, en consecuencia, "ser madre" es una heroicidad, y una aventura que cuenta con muy pocos apoyos, jurídicos, políticos, laborales y económicos. ¡Lamentablemente!
Si apenas pueden salir adelante, ¿van a sacarnos, ellas, del atolladero en que nos encontramos?
El sentimiento materno, no ya solo en los humanos, también en los animales, es un gran misterio. Esa protección que emana de forma espontánea desde antes del parto, ese anhelo incondicional llegando a dar la vida por el hijo... Pienso que es un misterio tan grande y extraordinario como la vida misma porque realmente la maternidad, repito, no solo en los seres humanos, es la vida.
ResponderEliminarSAludos.
Tienes razón Manuela, la maternidad es una realidad y un misterio, como la vida y va más allá de la especie humana. Tal vez no hemos valorado ni profundizado lo suficiente en la maternidad, ni apoyado a las madres como se merecen, ni humana, ni social, ni políticamente. En general,
Eliminarel varón humano, padre, tampoco está suficientemente valorado y la sociedad humana y jurídica tampoco hace exigible que sea valorado y responsable.
Un abrazo.