martes, 21 de diciembre de 2010
La sociedad civil necesita valientes
Ayer un amigo, escribía, en su Blog y en la Prensa: “Busco personas”. Y especificaba de qué clase de personas estábamos hablando. Cito sus palabras: “Busco personas que tengan el sueño de terminar con los privilegios de ciertos agentes y representantes que gestionan el poder en instituciones públicas y por supuesto de sus recolocados, amigos y compromisos puestos a dedo y con el riesgo de ser declarados funcionarios sin ningún tipo de oposición.
Busco personas que estén dispuestas a trabajar duro para lograrlo, que no se asusten ante nuevos retos, que se comprometan en serio al riesgo de jugarse el pellejo porque se cumpla el principio constitucional de igualdad en la pensión de jubilación para todos los ciudadanos, sin ningún tipo de abuso ni privilegio.
Busco personas con ganas de reducir la deuda de las Administraciones autonómicas y de suprimir aquellos gastos innecesarios y que no sean absolutamente imprescindibles; aunque supongan un coste político, un perjuicio propio en sus intereses personales o en su estatus socio-económico.
Busco personas que se dejen enseñar, que escuchen al resto de trabajadores españoles, que respondan de una forma real a la política de austeridad y que sean los primeros en dar ejemplo renunciando o legislando para perder todo trato de favor personal o interesado.
Busco personas de confianza, sinceras, honestas, que sepan cual es su prioridad en la vida, con ganas de trabajar más por menos dinero y menos favoritismos” (Antonio de Miguel, Blog: La verdad Congelada).
Me pareció todo un programa humano, político y social. Se lo hice saber. Le pregunté si estaba dispuesto a lanzarse y tratar de aceptar el reto. Y si pensaba que le iban a responder.
Su respuesta, que acepto y entiendo, es muy clarificadora. “Lo que reclamo es un cambio de actitud de los políticos. Creo que ellos ya han perdido la conexión con la sociedad…Yo no sería buen político en el actual sistema de política profesional…tendencia a convertirse en dioses y a corromperse…
La libertad, la independencia, la sinceridad, la honradez, la democracia, creo que curiosamente está reñido con la política. No puedo dedicarme a la política, soy demasiado humano, con demasiado corazón”.
Y a la segunda pregunta que le hacía: “De todas formas creo que no respondería nadie. La sociedad anda un poco enferma y no va más allá de las necesidades primarias; y por supuesto de implicarse, mojarse, posicionarse e incluso mancharse ni hablamos”.
Creo que ni se puede definir mejor el momento de la sociedad española, ni la grandeza quijotesca de mi amigo. Pero hay un poco de fatalismo en sus palabras.
Sin embargo, sé que no se va a cruzar de brazos. Yo tampoco. Desencantados de política, la sociedad civil entra en escena. El camino: “Despierto, para despertar”. Todo el mundo puede entender la razón: “Un dormido no es capaz de despertar a otro dormido”. La sociedad necesita despertar.
No podemos crear riqueza, humana, política, social, o financiera, a base de acumular miseria. Ya hemos acumulado tanta que hay que soltar lastre y replantear lo que queremos. Tenemos que encontrar y provocar una respuesta no sólo racional sino también emocional. El marxismo, tal como ha llegado hasta nosotros por los cauces del comunismo y socialismo, ha supuesto un coste enorme de vidas humanas y de valores esenciales. No podemos seguir engañándonos o dejando que nos engañen. Tenemos que comenzar por desbrozar el terreno de nuestra convivencia y anclar en él los cimientos de nuestro futuro.
“Resulta esencial que la sociedad recupere el protagonismo frente al Estado. El crecimiento del aparato estatal ha sido elefantiásico. Frente a un estado prepotente, la sociedad civil deja de existir, inerte, vencida antes de pelear, egoísta, miserable en sus ideas básicas…
Definamos de nuevo el verdadero alcance del producto estado, centremos sus límites y reasignemos el espacio a la sociedad civil, renaciendo en ella los valores que nunca debieron morir. Al final el mismo problema de siempre: edificar al hombre conforme a valores superiores” (M. Conde (ya en 1992), Días de Gloria).
¡Hay tarea! ¿Alguien cree que sin hacer nada podemos salir de la miseria? ¿Es razonable pensar, que sin poner algo de nuestra parte podemos terminar con la dictadura de las minorías? ¿Se puede sembrar la cultura de la vida y del cambio sin levantarse del sofá?
Se necesitan personas, pues claro. Primero las personas, después pequeños grupos y comunidades debemos dedicar nuestra vida “a la mayor visión de todos los tiempos: no esperar que un día un sabio nos ilumine; no esperar que un gobierno apruebe leyes justas; no esperar una revolución que corrija las injusticias de un mundo cruel… Cada uno de nosotros, por sí sólo y con todos los demás, es responsable de crear alegría y esperanza, eligiendo un estilo de vida adecuado, aquí y ahora”(Wayne W Dyer, En busca del equilibrio).
La tarea para los valientes es crear las condiciones para aportar bienestar a los demás. Condiciones en la que poder trabajar y convivir. Una sociedad libre y con valores, que aporte justicia e integridad, esperanza, responsabilidad e igualdad a nuestro alrededor. Hay que poner las bases para producir el cambio aquí y en todas partes. No dentro de mil años… ¡ya! Es el hombre actual el que está en juego; y sobre todo, el futuro de los niños.
¡FELIZ NAVIDAD!
PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES[21-12-10 14:48] - La sociedad civil necesita valientes; EL DIA, 31-12-2010.
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sábado, 18 de diciembre de 2010
Mercado ¿navideño?
Cuando estuve en Belén me tocó investigar lo de Herodes. Y desde entonces no he parado. Me apasiona el mundo de los niños. Además puedo viajar. Viajar enseña y me gusta conocer países, gentes, costumbres. Lo que voy a contar es tan real como la luz que nos alumbra. Es difícil narrar la experiencia de un viaje. Pero éste me ha marcado de tal forma, que necesito hablar de él. He buscado las palabras, no para que me crean, (no miento), sino para no herir su sensibilidad. La única licencia literaria es… el modo de decirlo. Nada es invención. Aunque pueda parecer extraño, no se podrá nunca aproximar a la realidad. En mi caminar, me he aproximado a un mercado navideño. Me gusta oír a la gente. Por eso pregunto, aunque tengo una duda: -Perdone, su negocio cerrará por estas fechas? -Espero que no. Está abierto las 24 horas, todo el año. -Es que algunos amigos me aconsejaban no hablar con ustedes en estas fechas. ¿Cómo ha podido obtener, todo eso? -Gracias a un contrato muy generoso. Somos intermediarios. Pero nuestros destinatarios son muy exigentes. No podemos escatimar ni dinero ni prudencia. Gracias a eso nos proporcionan órganos en perfecto estado para vender a los investigadores. -¿Quién se los proporciona? -La clínica donde se practican. -¿Es dinero oficial? -Es dinero. Una parte es institucional y la otra la ponen los laboratorios. -Los tiene muy bien seleccionados. Estos de aquí parecen grandes. ¿Qué tiempo pueden tener? -Interesan todos. Estos son tardíos. Oscilan entre 26 a 33 semanas. -¿De partos normales? -No. En general proceden de abortos por nacimientos parciales. -No lo entiendo. ¿Me lo podía explicar? -Lo solicitado es tejido fetal de alta calidad y órganos perfectos y sin anomalías. Pagan bien. Los abortos por nacimiento parcial son tan horribles que la gente ni se lo imagina. A nosotros nos consta porque tenemos “infiltrados”. Nosotros estamos fuera. En el caso de los abortos tardíos, que llamamos D y E (dilatación y evacuación) en algunos casos se produce un verdadero nacimiento, pero lo general es “penetrar el útero y desmembrar vivo al bebé. De esta forma se obtienen fetos u órganos vivos o muy frescos. Aún así se produce una selección. A los investigadores, sean de empresas farmacéuticas o de universidades, solo les interesan especímenes en las mejores condiciones. -Un poco fuerte, ¿no? -Esto es un mercado, o si lo prefiere, un negocio. Se mueve muchísimo dinero. El que paga exige. Nosotros hemos venido buscando mercancía completa: ojos, hígado, cerebros, tejido linfático, miembros y sangre. Si son fetos adultos, como esos, mejor. A fin de año, cuanto más perfecto y completo sea el pedido la Clínica recibe un plus especial. Se supone que también nosotros podemos venderlos mejor. Por eso se esmeran en atender nuestra lista de demandas. Generalmente le echan un vistazo antes del aborto propiamente dicho. -¿Tienen constancia de algún bebé nacido que tuviera vida y haya sido vendido? -Yo directamente no. Pero la persona encargada de recoger la mercancía, para llevarla de la clínica al aeropuerto, sí. ¡No era infrecuente! Aveces nuestro “agente” se había cruzado anteriormente con la chica que había ingresado para “desprenderse de aquello”. Sabemos que se trataba de casos entre 16 y 33 semanas. Pero teníamos que cambiar, porque psicológicamente, algunos agentes, no soportaban la vista del ser vivo. Cuando llegaba vivo en la bandeja, el médico o la enfermera le ponía unas tenazas hasta que morían o les partían el cuello. Un caso particularmente sensible está grabado en un video de Life Dynamics, por si usted duda. “Un día, dice Kelly, mientras estaba trabajando, nos trajeron un par de mellizos de 24 semanas de gestación en un recipiente. Ambos estaban vivos. El médico regresó y dijo: "Les tengo unos buenos especímenes, son mellizos." Yo lo miré y le dije: "Aquí algo anda mal. Se están moviendo. No quiero saber nada de esto. Esto no está en mi contrato." Le dije que no participaría en darles muerte. De modo que tomó una botella de agua esterilizada y la vertió en el recipiente hasta que el líquido subió hasta las bocas y las narices de los fetos, dejándolos que se ahogaran. Salí de la habitación porque no quería ver aquello." -No siga, por favor. -Por lo que veo no es usted investigador. -No. Bueno, en realidad no he hecho otra cosa en mi vida. Pero no pertenezco a un Laboratorio. Estoy viajando y conociendo un poco sus costumbres. Me pareció interesante en estos días de tanta compra y tanto comercio, con motivo de la Navidad, pasarme por aquí. Este mercado no es tan multitudinario, ni tan alegre, pero mueve también mucho dinero, como usted dice. Es la otra cara de la Navidad. El mercado de nacimientos que no llegan ni a un hogar, ni a Belén. Es el tráfico, semi-clandestino de inocentes, que se mueven por el mundo. -¿Me permite una última pregunta, por favor? ¿Tiene usted constancia de que las autoridades políticas, policiales o judiciales hayan intentado prohibir, este comercio? -No puedo responderle. Yo sólo sé que cada día se abren nuevas clínicas, y que nuestra cartera de pedidos no ha disminuido en absoluto con la crisis. -¡Parece que la maquinaria de esta industria está bien engrasada! ¡Gracias por su información! -¡FELIZ NAVIDAD!, ¿Señor...? -Soy Melchor. -Feliz navidad, señor Melchor. Y buen viaje. -A ver si me puedo pasar por Finlandia, antes del día 28, para deseárselo a Heidi Hautala, Presidenta de la Subcomisión de Derechos Humanos de la Eurocamara. Creo que a propósito del Premio Sájarov acaba de decir que “en los Derechos Humanos no debe haber espacio para dobles raseros”. -¿El día 28? - Sí, es que ese día, oficialmente es el día de los inocentes. Tal vez el año 2011 propongan para ese premio a estos inocentes. PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES [18-12-10 18:50] - Mercado ¿navideño?; BITACORA de BELMONTE CiViCa:Mercado ¿navideño? Enviado por BELMONTE el Dom, 19/Dic/2010 . NOTA:Puede saber más: Puede escucharse,ver,leer,o acaso simplemente recordar, el discurso de GANNA JESSEN, una sobreviviente del aborto. J.C. Willke, MD, "Baby Parts for Sale. A Batcha of Eyes by UPS -- 30 Livers by FedEx", Life Issues Connector, julio de 1999, 1 y 3, una publicación de Life Issues Institute, Inc. Fuente:http://www.facebook.com/l/0ae23TD39fd33-5HzlH4x7PEbzg;www.vidahumana.org/index.h
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martes, 14 de diciembre de 2010
Del máster a Cáritas
No es lo mismo contarlo que vivirlo. Aunque uno se imagine cómo están las cosas, hay que poner ejemplos palpables. Por contraste nos hacemos una mejor idea.
Muchos viven en la nube por los éxitos de nuestros deportistas. Por el mucho dinero que se mueve en su entorno, con patrocinios, imagen, becas y demás. El dinero mueve montañas y piernas y melenas. Sólo cuando se investiga o se descubre que los dioses y las divas pueden tener los pies de barro, por dopaje, se cae el tinglado de naipes. La sociedad se conmociona y descubre, por fin, el lado tramposo de lo humano.
Algo así pasa con la crisis, con el paro y con Caritas. Todos sabemos que anda suelto el toro de la crisis, pero solo cuando empitona a un amigo, a un familiar o a nosotros, sentimos la punzada desgarradora y fría de los números.
Habíamos oído que Caritas tenía que multiplicarse para hacer frente a las necesidades más urgentes. Paradójicamente la Iglesia católica, tan criticada e incluso perseguida, sin conocerla siquiera, resulta que acoge y amplía sus dispensarios parroquiales; sus comedores se llenan y tiene que abrir nuevos locales. Se han rebajado las ayudas sociales. El altruismo y la caridad son más necesarios que nunca.
La discreción y el secreto profesional amparan su servicio. Cualquier persona necesitada es recibida con amabilidad y respeto. Están llegando ya personas que se conocen, del barrio o la ciudad. Ni están en riesgo de exclusión, ni son marginales. Son necesitados.
De una de esas personas voy a hablar. Y lo hago con libertad, porque yo no pertenezco a Caritas, y porque mi fuente de información es la misma persona interesada a quien conozco. Ni siquiera voy a revelar si es un hombre o una mujer. Sé de lo qué hablo y de quien. Si alguien tiene un trabajo para esta persona, puede ponerse en contacto conmigo.
Se trata de una persona joven, tiene 25 años. Es licenciada por la Complutense. Tiene experiencia y formación universitaria en Informática, comunicación y redacción e Internet avanzado. Sabe varios idiomas. Este año ha comenzado un Máster, pero ha tenido que dejarlo, porque la beca que esperaba no se la han concedido. Es inteligente, y culta, inquieta y socialmente activa. Está desesperada porque aquellos que se han beneficiado de sus apuntes y sus notas, sí han encontrado trabajo. Su madre se ha esforzado hasta donde ha podido para que estudiara. Lo ha hecho y siempre con buenas notas. Muy buenas. No puede viajar porque no tiene recursos, ni es hija de papá.
Bueno, de su padre en realidad no sabe más que maltrataba a su madre, y ésta tuvo que divorciarse, pero no le pasa ninguna pensión. Por supuesto ha buscado y busca trabajo. Para no ser más gravosa a su familia, a quien el dinero no alcanza, ha decidido ir al comedor de Caritas. Es muy posible que en casa no lo sepan, ni se lo imaginen. Les dolería demasiado
Le han ofrecido un espacio en una emisora de radio, pero se tiene que buscar “patrocinador” y de lo contrario, ni espacio, ni contrato, ni dinero. Sus sueños por tierra.
Para todos los gastos dispone de 150 euros, acaba de decirme esta mañana. Cuando he intentado que me diera el número de cuenta o su banco o caja, donde podría(n) hacer algún ingreso, le ha dado tanta vergüenza, que... con un nudo en la garganta, se ha negado.
¿Qué futuro le espera? ¿Cómo se puede encontrar? Pónganse en su piel. El paro es un drama para todos, pero…para un joven (él o ella) y una familia, en estas condiciones, más. Habían pensado, esta persona y su madre, que las puertas del futuro se abrirían al esfuerzo y la cultura y… terminan en el comedor de Caritas. Aprieta los labios y continúa: allí comparte su pan con jubilados o prejubilados, algunos viudos, que no llegan a fin de mes. ¿Habrá muchos jóvenes así? No lo sé. Yo hablo de este caso. El Informe PISA, está ahí, habla de fracaso. La gran motivación para estudiar es tener esperanza de un trabajo.
Es dramático. Y más sangrante el dato que revelo, cuando se descubren las miserias de esta sociedad, y las injusticias justificadas. Quienes tienen la responsabilidad del bien común, no parecen comprenderlo. Tenemos y hemos tenido, Ministros que ni siquiera tienen una titulación académica. Y cuando llegan arriba, siguen colocando a dedo, a personas sin titulación ninguna. Todo el mundo lo sabe. Es así el drama de una nación y 17 autonomías. Copio directamente de la prensa del día 13-12-2010, en el apartado de Sanidad: “La amiga de Pajín primera auxiliar que llega a Directora General de Sanidad” (Leire Pajín es la Ministra de Sanidad, de Política Social y de Igualdad en el reino de España) (Tampoco ella tiene titulación universitaria).
Para el puesto al que encumbra a su amiga, se requiere, oficialmente, “título universitario” y “provenir de la Función Pública”. No cumple ninguno de esos requisitos. Para poner a su amiga “la ministra forzó la ley”, dice la prensa. “Para no incurrir en fraude de ley, la ministra aprovechó un real decreto”. Así ha podido colocar a su amiga, con el título de “auxiliar” al frente del Plan Nacional de Drogas.
De seguir así las cosas habrá que pedir a la Iglesia que siga abriendo comedores sociales también para titulados. Los sindicatos,-grandes beneficiarios de las subvenciones-, no han abierto la boca. Tampoco han arrimado el hombro para los comedores.
Sería bueno que los valientes, intentaran cambiar las cosas y que la sociedad civil despertara. Esta persona ha terminado diciéndome con amargura: “odio las navidades, no las puedo soportar, me duelen”.
¿Qué le diría usted?
PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES,en primera, como cartas a la Redacción Martes 14 de Diciembre de 2010 19:14;LA ESFERA DIGITAL: BLOG: A FAVOR DE LOS VALIENTESDomingo 19 de Diciembre de 2010; EL DIA,21-12-2010; NUEVA ALCARRIA,16-05-2011
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sábado, 11 de diciembre de 2010
Madre y muerte: antónimos
Los calmantes no son la solución. La industria farmacéutica, ante el dolor, cualquier dolor, fabrica calmantes. “No se pregunta por la razón del dolor, la causa del sufrimiento. Simplemente lo adormece. Pero la causa sigue viva y…volverá”(MC).
La sociedad en general y la política en particular es una industria de calmantes, y de paños calientes. No existe un proyecto para buscar la raíz del dolor y el sufrimiento, sobre todo de los más débiles. No se intenta descubrir la conexión de los hechos, ni la causa que produce los devastadores efectos. Si la humanidad no es un todo interconectado y una energía de principio a fin, la vida para muchos es una frustración. Sin miramientos ni horizontes, si se acaba con la vida, también con el dolor. Cada uno va a lo suyo: a solucionar “su” caso, y lo demás no importa. Ya hay paliativos para mitigar el dolor y en su caso acortar la vida.
El desconocimiento de la interconexión humana nos vuelve insolidarios y egoístas. Más que parecer, hacer o tener, lo importante es “ser”. Ser hombre, ser mujer, ser humano, ser hijo, ser madre o padre, ser trabajador, ser estudiante. Ser. ¡No haría falta más! Como los animales.
Cuando añadimos, aunque sea inconscientemente “ser cómo”, “ser más”, “ser distinto”, estamos introduciendo la comparación, la lucha, le infelicidad, la limitación de derechos y oportunidades para otros, generalmente los más débiles. Así no avanzamos, así nos destruimos, desde todos los ángulos, humanos, sociales, religiosos, familiares etc.
La imagen de la matanza de Delfines calderón en Dinamarca, impacta, pero queda lejos. La matanza de bebés focas en Canadá, igual. Sabemos que para un abrigo de astracán se necesita arrancar la piel de 30 fetos de corderillos. Pero se venden bien los abrigos. Nuestras vacunas tienen el soporte de una industria de fetos humanos abortados, lo sabemos. Más de un millón de madres humanas abortan en un año. La gran mayoría de los juegos que hay en el mercado y que llevamos a casa y entregamos a los niños son de guerra, de matar o aniquilar. ¡Mientras juegan no molestan! Matar es un juego en las sociedades avanzadas. El cinismo y la doble moral se respiran, están en todas partes.
Decir que no se debe preguntar a una embarazada si va a ser niño o niña, porque es una pregunta sexista, es absurdo. Cierto que hay campañas de información e iniciación sexual y de género en la escuela. Se destinan millones para defender a la mujer contra la violencia de género; hay leyes especiales, juzgados especiales, teléfono especial, brazaletes GPS, casas especiales de acogida y “derechos” de la mujer o para la mujer, o madre, sobre la vida del hijo o hijos de sus entrañas.Pero a la vez, los niños menores siguen muriendo, y en muchos, muchísimos casos por voluntad, deseo, implicación, complicidad o trastorno de su madre.
Estamos a la cola de Europa en educación, pero se regalan a los niños los portátiles. No hay dinero para campañas de convivencia, de respeto, responsabilidad y educación. Hay facilidades para píldoras, interrupciones voluntarias del embarazo etc. Se ignoran los valores fundamentales y cívicos. No se apoya a la familia, como base de la sociedad. Se fomenta el laicismo activo y se destierra o ridiculiza el sentido trascendente de la vida. Se contabilizan, de forma pública y escandalizada las víctimas de violencia de género. Es un caldo de cultivo para el descontrol y la inestabilidad emocional. Socialmente no es un ambiente propicio para desarrollar una personalidad equilibrada. Y para ser madre o padre, es muy necesaria. Se es madre o padre, para siempre. Se olvida a veces.
Por eso hay otras víctimas, también inocentes. Ese caos social y moral es una bomba y estalla como tal. Lo sufren y padecen los más vulnerables. ¿Causa efecto? ¿Quién lleva la cuenta del desamor? ¿Dónde se lleva la estadística de la violencia contra los menores? Las víctimas de las rupturas familiares están expuestas a la violencia, también al capricho -otro tipo de violencia-, a abandonar los estudios, a ser violentos y agresivos, a consumir sustancias, y expuestos a marcharse del hogar y muchas veces a terminar en prisión. Conductas, en fin, de difícil convivencia, ya desde muy temprana edad. ¿No sabe nadie que lo que necesitan todas estas criaturas es cariño?
Los inocentes menores de Valladolid, no estaban en una maleta. Fueron hallados en la cama, pero sin vida. ¡Terrible! Y estas muertes se suman a otras, hay que sumarlas aunque cueste. Y según una estadística que ya está en Internet (Yahoo), las mujeres han matado un 117% más niños que los hombres. Es un dato, no un consuelo. Otro dato: sólo 3 niños fueron asesinados por madre no española (británica y belga).
La violencia no viene sola. No se puede ignorar que la de la madre con sus hijos, -los de su vientre y los menores de edad-, también es violencia. Decir que el aborto es un derecho, no es más que instalar en la sociedad la violencia gratuita. Su tremendo daño no se cura con paños calientes, ni su crimen con simples políticas de igualdad. ¿Lo entenderán los valientes?
PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES [12-12-10 20:07] - Madre y muerte: antónimos; La Esfera Digital: Blog: A Favor de los Valientes
12-Diciembre-2010; EL DIA17-12-2010
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jueves, 2 de diciembre de 2010
Para un héroe
Absolutamente triste me pongo a escribir hoy. Me tiembla de miedo el alma. El dolor atenaza mis dedos y no soy capaz ni de ordenar palabras coherentes en forma de oración; ni gramatical, ni de las otras.
Tres años, (mil y pico días), sin que nadie se percate ni reclame la desaparición de un niño, es una eternidad.
Nueve años (tres mil doscientos y más días) entre la familia y la escuela, el pueblo o la ciudad, los maestros y los compañeros, sin que nadie haya sentido su cariño y su vacio. ¿Se ha ido un niño sin tocarnos el alma? ¿A nadie? ¿Nadie le ha querido? ¡No puede ser verdad! Me da tanta vergüenza que no puedo y no quiero creerlo. ¡No puede ser, España! ¡No puede ser madres! Los padres no solemos contar(oficialmente), pero tenemos corazón, y nos duele.
No puede ser, ¡maestros! No puede ser, ¡maquinaria administrativa! No, no puede ser, que nos falte tres años un niño de 9 años -que hoy tendría 11-, que va a la escuela, y tiene sus lápices de colores y sus dibujos y sus sueños, y se muera o lo maten, y a nadie le importe nada. ¡Pobre niño! ¡Qué pena de sociedad!¡Que asco de sociedad!
Dicen que junto al esqueleto hallaron su reloj, unos libros de cómic, unos lápices de colores, la goma con su nombre, unos cromos y varios muñecos infantiles. ¡Toda su infancia! ¿Tiene algo más un niño, si no tiene además una madre? ¿Ni abuelos, ni tíos, ni parientes?
“Asesinato por vergüenza”, titulan los periódicos. Hacen referencia a la madre. Del niño, ni mentarlo. Solo que se ha pasado 3 años metido en una maleta con sus lápices de colores y sus gomas, esperando que algún compañero o maestro venga a buscarle, para ir a la escuela.
¡No puede ser que haya llegado tan baja la autoestima! ¡Ya sabíamos que la más terrible de las crisis es la crisis de héroes! Pero si la crisis es también de madres, es que todo se ha vuelto piedra, cemento o de hielo, que es peor. ¡Es la peor de las negruras! ¿Quién puede suplir el abrazo de un niño, la música de sus labios llamándote “mama”? ¿Cómo se puede olvidar?
¿De qué me sirve, recordar a la mía, o a la madre de mis hijos? De qué sirve saber que decía Balzac “jamás en la vida encontrarás ternura mejor, más profunda, más desinteresada ni verdadera que la de tu madre”. ¿Tanto tiempo ha pasado? ¡Madre!,es “la vocación más noble de la tierra; la más bella de todas las artes, la más grande de todas las profesiones”? ¿Y se puede una madre avergonzar del hijo de sus entrañas? ¿Ante quién puede sentir vergüenza para acabar con el hijo al que ha dado la vida? ¡Que le den por donde le tengan que dar al mundo entero! ¡Es tu hijo! ¡El orgullo de una madre, de cualquier madre!
¿Por qué tuvo que ocultarlo a su pareja? ¿Por qué no quiso verle alegre salir de la bañera?
No me consuela, para nada que a esta mujer de 30 años, Mónica, la metan en prisión, en Mallorca o donde sea. Me da igual donde la metan o la dejen de meter. ¡Tiene que estar –creo- en un lugar muy oscuro y muy triste para hacer lo que hizo. ¡Quitó a César, lo que le había dado, la vida! ¡Seguro que necesita ayuda, como las madres que les quitan la vida cuando aún están en sus entrañas! ¡Hay cosas que no las borra ni la goma de un niño, como el peso de esa maleta sobre el alma! ¡Tienen que ayudarla, por favor!
Y ¿qué pensarán los maestros y los niños cuando abren los estuches de colores? ¿Y los padres y abuelos cuando pongan este año los regalos a los pequeños? ¡Triste Navidad!
Willian Wallace llegó a decir que “la mano que mece la cuna es la misma que rige el mundo”. Seguro que esa mano, por lo menos, está tan desolada como la mía. Pero le pido que tome prestados esos lápices de colores y plante en el cielo un arcoíris para un héroe como César. Y para todas las vidas nacientes de los niños. Que plante también esta pregunta, para que mañana no se nos olvide: ¿Por qué?
PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES[02-12-10 19:21] - Para un héroe
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//www.investigadoresyprofesionales.org/drupal/blogs/belmonte 7-12-2010; La Esfera Digital,A favor de los Valientes, 8-12-2010; NUEVA ALCARRIA 06-01-2011
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